Notas apologéticas.

Parte 2.

Protopresbítero Padre Miguel Pomazanski

Traducido por Dra. Elena Ancibor

 

 

 

Contenido:  

Dios crea a todo lo que quiere (Sal. 114:11).

Dos elementos en el mundo. El elemento muerto. Las leyes del intelecto y de la finalidad. El hombre. La sociedad. El universo. "Y dijo Dios."

Con la palabra de Dios se afirmaron los cielos.

El dogma de la fe.

Desde el conocimiento a Teoconocimiento.

Sobre la naturaleza. Sobre la composición y designo del hombre. La imagen Divina en el hombre.

La Iglesia sobre la Sabiduría Providencial.

1. Que significa: "La Iglesia nos enseña"? 2. La omniabarcante Sabia Providencia Divina. 3. La sabiduría — no es un ser personal. 4. Sofía — "el alma del mundo?" el principio femenino en Dios? La vida del mundo en el Espíritu Santo. La vida en la fe. Vimos la Luz verdadera. Dos tipos de Iluminación. La Luz en las tinieblas.

La Iglesia de Cristo,

Según la enseñanza del beato Simeón, el Nuevo Teólogo.

 

 

 

Dios crea a todo lo que quiere (Sal. 114:11).

 

El principio de la finalidad ó la ley de la causalidad.

Para que? — Porque? — Estas dos preguntas son características a cada uno de nosotros ya desde la infancia, desde el momento cuando se despierta en nosotros el pensamiento y comenzamos a dominar el habla. "Con que finalidad, por que causa"?

En la pregunta "Para que?" se esconde el pensamiento sobre lo que será mas adelante, de un acontecimiento dado. Con esta pregunta esta relacionado el punta de vista religioso.

En la pregunta "Porque?" se expresa el pensamiento de lo que precedió y provocó al fenómeno de un hecho dado ó de un objeto. Esta pregunta esta relacionada con una posición positivista, como la visión del mundo.

Lo que se puede referir al pensamiento cotidiano, también puede ser referido a las "cuestiones de la eternidad." "Causas" o "fines" se encuentran en el primer lugar de la vida de todo lo existente.

El pensamiento contemporáneo, que se autopregona científico, que se trata de alejar de conceptos religiosos y se apoya en los principios del materialismo, ignora las cuestiones de "finalidad," las rechaza en las temas principales de la existencia del mundo, y en la parte vital lleva al concepto de las metas al mínimo, induciéndonos, que las acciones tanto en los movimientos sociales como hasta en nuestra vida personal, que nos parecen acciones libres, en realidad están hasta tal punto condicionadas por las circunstancias precedentes, que nuestra voluntad personal solo obedece a "la ley de la causa." De esta manera, seguir el esquema, la conformidad al fin y la dirección hacia un meta de nuestras acciones es solo aparente y en todo caso, preestablecida en los movimientos "sociales." No seriamos, ante este punto de vista, solo un juguete del destino?"

Indudablemente, esto no es aceptable para nosotros. No pensando entrar en teorías "científicas," debemos basar a nuestro principio cristiano en el objeto dado del pensamiento, no dudando que es verdaderamente común a todos los humanos, y a partir de él se define nuestra visión del mundo.

 

Dos elementos en el mundo. El elemento muerto.

El universo, cosmos, consta de dos elementos diferentes: uno muerto y otro vivo. Donde esta el elemento muerto — allí actúan las leyes estrictamente físicas. La escénica de sus acciones puede ser formulada como "Causas y sus efectos." Allí la masa de la "materia" principalmente en su forma burda, casi salvaje, y la "energía" física, una y otra en movimiento, con riqueza de elementos, cuyas uniones y descomposiciones dan automáticamente resultados muy exactos. Estos efectos pueden ser calculados y investigados perfectamente con la ciencia exacta, y la humanidad utiliza su conocimiento en su provecho y utilidad, a veces también, en daño a si misma. En esta esfera reina la matemática. La matemática, en si, es la exactitud perfecta. Sus leyes son severas y invariables. En su aplicación a la naturaleza muerta, para determinar las causas y efectos, la matemática nos muestra e ilumina una exacta uniformidad en el curso de causas y efectos. En este elemento del mundo la ley es automática.

 

Las leyes del intelecto y de la finalidad.

En la parte viva del mundo es otra cosa. La vida en si misma es una existencia misteriosa. En los seres mas elementales, comenzando por las bacterias, invisibles a simple vista, hay una tendencia de sobrepasar lo automático y mecánico. Los seres vivos, comenzando por las formas mas inferiores, muestran la voluntad propia de movimiento; mas adelante, en orden de la elevación y complicación de las formas — la tendencia a la alimentación; luego algunos principios de orientación; luego — la capacidad de sentir, luego la habilidad y después ya cierta inteligencia y finalidad y las metas en distintas direcciones. Sin duda, aquí actúa también la ley de "causalidad," pero regulada por una tendencia propia: así la planta sabe cuando es útil para ella darse vuelta a la luz, cuando abrir o serrar a la flor. Sobre el pequeño globo terráqueo — que riqueza de formas de seres vivos en el mundo animal y vegetal! Y como fuente de su alimento, este mundo tiene la materia muerta: tierra, aire, agua, etc.

Y cuan conforme al fin aparece aquí, que la naturaleza muerta es inamovible es sus "leyes de casualidad." Con que comodidad, el elemento vivo usa al elemento muerto.

Y en su unión y concordancia — se abre para nosotros la inconcebible Sabiduría activa!

La vida sabe, en forma sorprendente, estar en armonía con la naturaleza muerta. Pero a ella es característica la libertad. La vida no puede ser encerrada en la jaula de hierro de la necesidad. Y en si misma ella encuentra las fuerzas para romper las cadenas de la naturaleza muerta. Esta claro, que la vida es un principio especial y particular en el mundo, espiritual en su calidad, al cual, en un estado potencial y como encubiertos, son característicos la inteligencia, el sentimiento, la voluntad, la capacidad de percepciones y la reacción a ellos.

De ahí vemos: que grandeza de proyecto! Que plenitud de la existencia en la concordancia de lo muerto con lo vivo, de esta región donde actúa solo la ley de causas y efectos, con la región donde reina simultáneamente una libre conformidad al fin.

 

El hombre.

El hombre es el habitante de la tierra, y él es también, el que gobierna sobre ella. Pero él es, asimismo, el hijo de la tierra. Él, en mayor grado, que otros seres, pertenece al elemento vivo, sin embargo, está unido a la carne, tomada de la naturaleza muerta, portadora de la ley exacta de causalidad matemática y necesita esta defensa y comodidad que da la medida de las leyes de la carne. Pero, él es capaz de limitar a esta "presión de la necesidad," que pertenece al cuerpo.

La aspiración a la meta existe también entre los animales, pero en el hombre ella, en si misma, constituye en mayor medida, un móvil general, que dirige, regula y protege sus acciones. La libertad del espíritu de la vida, a veces, solo dificulta su posición, cuando chocan los dos impulsos, provenientes de dos fuentes: de la carne y del espíritu. Además tenemos nuestras "casualidades espirituales" — las causas que chocan con nuestra tendencia al fin general. No debemos olvidar, que nosotros, los cristianos, tenemos nuestras leyes de la causalidad cristiana, de la voluntad y de la conformidad a la meta. Todo esto crea una complicación y al mismo tiempo otorga un contenido para nuestra vida interior.

 

La sociedad.

La vida de la sociedad se compone de vidas individuales, por consiguiente, incluye todo lo que pertenece a cada uno en particular. Pero esta situación es complicada. Cada uno tiene su camino de la vida, sus planes para el día de mañana, su libertad y su dependencia de lo imprescindible. Todo esto, en la medida de posibilidad, se lleva a un acuerdo, pero a veces surgen colisiones.

Pero si aceptamos, que el hombre difiere de los animales por sus metas elevadas (lo que es aplicable a la sociedad), — seria correcto llamar "un verdadero progreso" de la sociedad el hecho, que la tratan de encerrar en una esfera puramente practica, de la vida cómoda y confortable, según el principio "racional", terrenal, y en realidad insensato, dada la corta existencia sobre la tierra de cada hombre y, en conjunto, de toda la humanidad. Este tipo de progreso se considera actualmente, como verdaderamente científico.

 

El universo.

Alguien, con el punto de vista materialista o agnóstico nos dirá: "Uds. olvidan, que el globo terráqueo es una migaja en el universo, y se lo imaginan como un centro del mundo, y sobre esto construyen sus conceptos religiosos, sacando una conclusión desde lo unitario hacia lo general." Contestamos a semejante concepto: Hablando de Dios, solo se puede hablar como del Creador y Proveedor de todo el universo y de nuestro Salvador. Este mismo reproche vuelve como una perplejidad en la misma dirección de donde provino, cuando escuchamos una comunicación, aparentemente "científica" pero con cierto rasgo de misterio, que sobre la tierra existe un elemento, que en combinaciones adecuadas con otros elementos, da como un destello de vida; es necesario solamente que tal combinación se produzca — y aparecerá la semilla de la vida...

Pero en primer termino, en medio de la leyes exactas, conformes a la materia terrestre, nadie descubrió una semejante ley de la materia. Quede para suponer una inesperada "casualidad"? Por otro lado, si la tierra es una partícula en el universo, tal como es, y si imaginar sobre ella cierta causalidad y ponerla como ejemplo de la posible aparición de la vida en el universo, no parecería este concepto semejante a un juego de niños? En realidad vemos que en todas las especies y géneros de seres vivos la vida se trasmite de vida. Así es su ley.

Nosotros nos inclinamos ante la grandeza de aquel sagrado panorama Bíblico, que se ve a partir del segundo versículo del 1-er capitulo del libro Génesis, que abreviado se escucha en las lecturas de las principales festividades cristianas: la Navidad de Cristo, el Bautismo del Señor y el Sábado antes de Pascua. Mencionamos el comienzo y el final de esta lectura:

 

"En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas... Después dijo Dios: Produzca la tierra hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto según su genero, que su semilla este en él, sobre la tierra. Y fue así... Y fue la tarde y la mañana: el día tercero" (Gen. 1:1-2, 11-13).

 

"Y dijo Dios."

Según el relato Bíblico en el 1-er capitulo de Génesis, la plenitud de la Creación del mundo esta incluida en seis días de creación. Algunos de sus actos están expresados en tres breves palabras: "Y dijo Dios." Esta claro, que la palabra "dijo," repetida nueve veces, simboliza la voluntad Divina y su cumplimiento sin obstáculos y indiscutible. Ante la primera sentencia, las masas muertas se dividen y se llenan de luz vivificadora, imprescindible para la existencia del futuro elemento de la vida. Con las siguientes palabras Divinas se envían al mundo como "semillas o rayos de vida," por su escénica ya no físicos, sino de cualidad algo espiritual, imponderables, no sujetos a la medición instrumental. Estas partículas de la vida tienen que atraer a si y vivificar a las partículas de la materia y energía terrestre y de esta manera llenar el mundo terrenal con seres vivos. El hombre en esta esfera — es la creación Divina superior, su alma lleva en si el soplo Divino en su rostro.

"Y dijo Dios... Y fue la tarde y la mañana." Estas palabras están dichas por primera vez el tercer día, con las subsiguientes repeticiones de ellas. Cada tarde y mañana son el principio y el fin "del periodo nocturno," cuando se produce en cada ser vivo en la tierra, incluyendo nosotros, un proceso invisible de crecimiento, fortalecimiento, refresco, reconstitución y renovación de las fuerzas. Nos levantamos a la mañana y vemos algo nuevo en la naturaleza, una flor, abriéndose, o también la aparición de un nuevo ser. No es así el proceso del relato Bíblico? Así, por analogía, con el hombre, en el relato Bíblico: "Y vio Dios que era bueno" — leemos después de cada "Y fue así."

El relato de Moisés esta escrito por él para la gente de la tierra, para su pueblo, para instrucción espiritual de ellos y de nosotros. Por eso esta limitado al tema de la tierra y la humanidad. No se nos prohibe imaginar la situación en otros lugares del universo, parecidos a la existencia terrenal.

A nuestro pensamiento lo retiene y admira otra cosa: la altura del espíritu y del pensamiento del profeta Moisés, su osadía, pero por su carácter inspirada por Dios, toma sobre si el cargo: dar una imagen general de origen del mundo, la aparición de la humanidad, su primera historia, la historia de su pueblo, como elegido de Dios, afirmar el monoteísmo en el y comenzar la historia de la Iglesia de Dios — del Antiguo Testamento. Existía un idioma popular primitivo, carente de conceptos abstractos. Había medios muy primitivos de escritura. Pero la tarea fue cumplida: cuatro y medio milenios atrás!

Si el principio de la "finalidad" claramente actúa en nuestro mundo terrenal, si aquí se muestra la armonía en su parte viva y vital, concordancia con las leyes de la naturaleza muerta, dependencia de ese segundo elemento del principio vivo y servicio a él, si en todo esto vemos una profunda inteligencia ordenada —- de ahí penetramos con el pensamiento sobre la bendición Divina, sobre Su benevolencia; nos queda solo alegrarnos de la grandeza de la creación del universo, como también de nuestro mundo terrenal; pensar y actuar de manera de ser dignos de la benevolencia Divina y Sus dones, que el apóstol Pablo en su epístola a los Romanos fijo con incomparables palabras:

"Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios!

...Porque de Él, y por Él, y para Él son todas las cosas. A Él sea la gloria por los siglos. Amen."

 

 

Con la palabra de Dios se afirmaron los cielos.

"En el principio era el Verbo... Todas las cosas por Él fueron

hechas y sin Él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho" (Jn. 1:3).

"Por la palabra de Dios fueron hechos los cielos" (Sal. 33:6).

En un articulo de prensa eclesiástica, donde el autor habla dignamente de los 4 Evangelios y expresa una visión del mundo cristiana, sin embargo tiene un pensamiento inaceptable y falso sobre los primeros versos del Evangelio de Juan. El autor dice, que, nombrando a Jesucristo "Logos" (en griego), "Slovo" (en eslavo) y "Verbo" (en latino) — esta denominación esta tomada por el Evangelista de la filosofía griego-judia del judío alejandrino Filon. A pesar de que su visión del mundo no coincide completamente con el Evangelio de Juan, pero mucho no esta claro sin conocimiento con esta filosofa.

El sentimiento cristiano no puede coincidir a esta afirmación.

En todos los libros del Nuevo Testamento — donde se pueden encontrar, aunque sea un intento de acercamiento de las verdades cristianas con la filosofía griega? No está llamando el ap. Pablo a la sabiduría de ese siglo: "Nadie se engañe a si mismo...La sabiduría de este mundo es insensatez para con Dios; pues esta escrito: El prende a los sabios en la astucia de ellos... El Señor conoce los pensamientos de los sabios, que son vanos" (1 Cor. Cap. 3). Quien podrá acusar al Apóstol de tener una angostura ciega de la mente? Y sobre el ap. Juan diremos: podía haber necesitado recurrir a la filosofía mundana aquel, que proclamaba con toda la fuerza del espíritu: "Esta es la victoria, que ha vencido el mundo, nuestra fe. Quien es el que vence el mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?" (1 Juan).

Si el Evangelista Juan tuviera en su alma cierta misteriosa y especial imagen de "Logos," en aras del cual escribe el Evangelio, él continuaría usando ese nombre para el Señor en sus obras. Pero esto no existe. El mismo primer capitulo de su Evangelio esta lleno de otros nombres del Salvador: la Vida, la Luz, el Hijo Unigénito, que se encuentra en el seno del Padre, el Cordero Divino, Mesías, Cristo, Hijo de Dios, Rey de Israel, Rabí, Hijo del Hombre. Y solo en el 14 versículo de este capitulo leemos: "Y aquel Verbo fue hecho carne, y habito entre nosotros." Pero esta tan alejado de cierta imagen filosófica, ya que leemos a continuación: "Y vimos Su gloria, como Unigénito del Padre, pleno de Gracia y verdad."

Si, el Evangelio de Juan es en verdad el Evangelio de la "Palabra," pero "Palabra Divina, ya que consiste casi todo de las palabras del Mismo Señor Jesucristo, que atestigua: "Mi doctrina no es mía, sino de aquel que me envió" (Jn. 7:16). Este Evangelio propiamente dicho, representa la misma "Teología." Es el cuarto, escrito después de los anteriores tres. Pero en la conciencia de la Iglesia y en la practica de los oficios Divinos, ocupa el primer lugar. El ciclo anual de las lecturas Litúrgicas comienza con el primer capitulo: "En el principio era el Verbo..." Por este mérito la Iglesia llama al escritor "el Teólogo."

Tenemos que rechazar enérgicamente las afirmaciones del autor del articulo nombrado, y de todos semejantes, de que ap. Juan "aplicando, el nombre "Logos" a Jesucristo, le quiso otorgar un sentido nuevo." El ap. Juan no era un pensador de gabinete, que seguía el espíritu de filosofía griega, o judea-alajandrina, no lo atraían los papiros de la biblioteca y pergaminos de ideas filosóficas. O iba él aprovechar para su meta elevada alguna idea fortuita?

Hay solo, un otro lugar, en los textos de los libros del Testamento Nuevo, en Apocalipsis, donde el Salvador es nominado "Logos" (cap. 19): "Vi el cielo abierto; y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llamaba Fiel y Verdadero... y tenia un nombre escrito que ninguno conocía sino el mismo. Estaba vestido de una ropa tenida de sangre; y su nombre es: el Verbo de Dios" (11-13). La exegética Bíblica ve en esta imagen un vinculo directo con la visión, como fuera su realización presente en el profeta Isaias: "Quien es este que viene de Edom con vestidos rojos?...Porque es rojo tu vestido, y tus ropas como del que ha pisado el lagar? — He pisado Yo solo el lagar... el ano de mis redimido ha llegado... tu Señor eres nuestro Padre, nuestro Redentor perpetuo es tu nombre..." (Is. 63:1-4, 16).

La coincidencia de estos dos lugares en el Nuevo Testamento: Evangelio y Apocalipsis, además de su importancia espiritual, es valiosa para nosotros porque afirma la pertenencia de Apocalipsis al ap. Juan, como escritor de esta Revelación de lo Alto. Para nosotros en el caso presente es importante, que nombrando al Señor, justamente aquí, como "la Palabra Divina," se elimina todo pensamiento filosófico de "Logos" como un principio independiente, intermediario entre Dios y el mundo, o "Paraclitos" (como el Logos esta nombrado por el autor del articulo arriba mencionado). Paraclitos o "Consolador" es llamado el Espíritu Santo por el Señor, en su conversación de despedida con sus discípulos.

Sobre esto dejaremos de fijar nuestra atención en el mencionado articulo. Pero de otra parte nos queda una pregunta: porque el evangelista en los primeros renglones de la buena nueva introduce el nombre "Palabra" — "Logos, " aplicándolo al Señor Jesucristo? Y al mismo tiempo, porque justamente, solo estas líneas sirven como casi único lugar de aplicación del nombre "Logos-Palabra" en los libros de sagrados Escrituras del N T.? ... Que nos perdone el Santo Apóstol, que nosotros pecadores con nuestra mente baja irrumpimos en su sagrado pensamiento, en el parte del alma no expresada directa y abiertamente, y que se llama el pensamiento subconsciente.

La atención de cada cristiano, conocedor de la Biblia, es atraído por el paralelo entre en comienzo de "Génesis" y comienzo del Evangelio de san Juan. Fijaremos nuestra atención sobre esta cosa.

"En archi" — "en el principio" — las primeras palabras ambas obras sagradas. En el griego "archi" tiene tres significados: a) comienzo de un acontecimiento o obra, en el sentido común, simple de esta palabra; b) Potestades, Señoríos o Poderes; c) y en el sentido del tiempo antiguo, pasado, anterior, y en sentido religioso — eterno, no limitado por el tiempo.

Moisés en Génesis usa "arhi" en el primer sentido, común: Dios antes de Sus acciones fuera de Si, creo el cielo y la tierra. La misma palabra se encuentra en el Evangelio de Juan, pero el Apóstol eleva el sentido de la palabra griega. La palabra "arhi": "En el principio era el Verbo" — el Verbo, como una existencia Divina personal, "en el principio" — antes de toda otra existencia, mas todavía, fuera del tiempo, en la ilimitada eternidad. En el mismo Evangelio una vez mas aparece esta palabra y en el mismo sentido; citamos el versículo. Cuando los judíos preguntaron al Señor: "Quien eres Tu? — Jesús les dijo: el Existente desde el principio, tal como les dije" — Tin arhin, oti ke lalo imin. Así los dos primeros libros de los dos Testamentos, comienzan con una misma palabra expresiva; pero en el libro del N.T. tiene un sentido mas alto que en el Génesis.

En los siguientes textos de ambos libros, sobre todo en los 5 primeros versículos, vemos este vinculo interno, posiblemente, no especialmente citado por el Evangelista, ya que no esta mencionado en la secuencia exacta, pero como una conexión que sale por si misma del tema de estos dos objetos de discurso. Aquí se define claramente para nosotros la grandeza de los acontecimientos del Nuevo Testamento en contraposición de estos con los del Antiguo Testamento. Citamos este paralelismo, poniendo en primer termino el libro de Génesis y en segundo — el Evangelio.

 

Génesis

Evangelio

1. "En el principio creo Dios..."

2. "Y dijo Dios: Sea..."

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

3. "La tierra era desordenada y vacía"

(sin vida).

4. "Y dijo Dios: Sea la luz." —

Esta dicho de la luz física.

 

 

5. "Y las tinieblas estaban sobre la faz

del abismo..."

 

 

En los siguientes versículos:

6. Sobre el Espíritu Santo. "Y el Espíritu de Dios se

movía sobre la faz de las aguas..."

 

 

 

 

7. "Y dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen... Y creo Dios al hombre a su imagen..."

 

 

 

8. "Y reposo Dios al día séptimo de toda la obra que había hecho" (Gen. 2:2).

 

1. "En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios." Aquí la verdad del Monoteísmo se eleva con la revelación de la Segunda Persona en Dios, (la expresión "era con Dios" se explica mas adelante en el versículo 16:"El Hijo Unigénito, que esta en el seno del Padre).

2. "Todas las cosas por él (Verbo) fueron hechas, y sin él nada de lo que a sido hecho, fue hecho."

El verbo "dijo" se precisa con las palabras "dijo con la Palabra," indicando la participación de la Segunda Persona Divina, Creador de todo el mundo, cumpliendo la voluntad del Padre.

3. "En Aquel (Verbo) estaba la vida" (Una contraposición).

4. "Y la vida era Luz para los hombres."

El objeto del pensamiento se eleva inconmensurablemente, a pesar de usar una misma palabra.

5. El Verbo, Hijo de Dios: "La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella" — (Una contraposición).

6. Se mencionan las palabras de Juan el Bautista: "Y yo no lo conocía; mas para que fuese manifestado a Israel, por eso vine yo bautizando con agua. También dio Juan testimonio, diciendo: Vi al Espíritu que descendía del cielo como paloma, y permaneció sobre él" (vers. 31-32, Comparación).

7. Sobre la Palabra que se hizo carne.

"Y aquel Verbo fue hecho carne, y habito entre nosotros, lleno de gracia y de verdad; y vimos su gloria, gloria como del Unigénito del Padre" (vers. 14, — Comparación).

8. La llegada de la Palabra a la tierra. Las palabras del Creador: "De aquí adelante veréis el cielo abierto, y los ángeles de Dios que suben y descienden sobre el Hijo del Hombre" (Jn. 1:51, — Comparación).

 

 

Esta coincidencia, una vez de los pensamientos, otra de expresiones, entre dos libros sagrados del A.T. y N.T., esta luz del primer Evangelio (en el sentir de la Iglesia), que cae sobre el primer libro del profeta Moisés, es afirmada con las palabras con el mismo Apóstol en 1-er capitulo de su Evangelio: "De Su plenitud tomamos, y gracia sobre gracia. Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo" (v. 16-17).

Y no hay necesidad de buscar el origen del nombre "Logos-Verbo," que entro firmemente en el cristianismo. Este nombre - concepto, no es ajeno, en general al A.T. "Por la palabra del Señor fueron hechos los cielos, y todo el ejercito de ellos por el aliento de su boca" (Sal 33:6) dice el Salterio, que era la lectura cotidiana de los judíos en el texto hebreo antiguo o en la traducción de los 70. Lo mismo en el Salmo 119:89 "Para siempre, oh Dios, permanece tu palabra en los cielos" (148:4-7; 107:15).

Pero mas claro todavía nos ilumina el sermón de despedida del Señor con Sus discípulos: "La palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió" (Jn. 14:24). "Todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer" (15:15). "Todo lo que tiene el Padre es mío" (16:15). Este es el tema básico de este gran sermón, igual que la oración sumosacerdotal que lo sigue.

La Iglesia Ortodoxa tomo con amor la designación de "Verbo" para el Hijo de Dios y lo usa ampliamente, pero no aislado, sino con uno u otro calificativo ó atributos: "La que dio a luz al Dios-Verbo" (cántico a la Virgen): "Hijo Unigénito, Verbo Divino" (cántico litúrgico); "Omnipotente, Verbo del Padre" (en las oraciones de los que van a dormir).

 

 

El dogma de la fe.

Nuestro maestro de la fe viva, santo padre Juan de Kronstadt en su libro "Mi vida en Cristo," señala: "La fe es la llave para el tesoro Divino." Es una definición de la fe muy sabia y valiosa. La fe abre el acceso a la riqueza de los tesoros Divinos de la vida y la eternidad. El continua: "La fe mora en un corazón simple y amante. Si puedes creer, al que cree todo le es posible."

Y además escribe: "La fe — es la boca espiritual: cuan mas libremente se abre, tanto en mayor torrente entran en nosotros las fuentes Divinas; que se abra esta boca en la oración, igual que la boca del cuerpo; no la aprietan con la duda y falta de fe para que entre el tesoro de los bienes Divinos. Cuando con mayor abertura y cordialidad crees en la omnipotencia Divina, — tanto con mayor generosidad se abrirá para ti el corazón de Dios. Orando, pidan, creen, que recibirán: y lo tendrán" (Mi vida en Cristo).

Es por eso que la fe se puede llamar el primer dogma del cristianismo. Todo el Nuevo Testamento esta lleno de la predica de la fe.

Es difícil explicar el contenido del concepto de la fe. El ap. Pablo se expreso sobre ella así: "Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve." "La certeza para los que esperan" — es la afirmación de que sin duda es, era y va a estar siempre Aquel, en Quien esperamos nosotros; aquí — una afirmación interior, noticia secreta, que todo es así. "La convicción de lo que no se ve" — a pesar de que no vemos, no esta revelado por experiencia externa, el invisible se abre a través de la experiencia interna: en la ampliación de horizontes espirituales, en la alegría, o de otra manera — a través de la oración.

La fe es real, eficaz y actúa en el hombre cuando su objetivo es real y no solo imaginario.

La fe lleva a la unión con aquello o aquel en quien crees.

La fe puede ser fuerte, si el objeto de la fe tiene fuerza o pertenece a la Fuerza superior.

La fe es alegre, pero trae alegría solo si creemos en lo perfecto, en lo verdadero, alto o elevado.

La fe verdadera eleva, otorga alas, fortifica, hace invencible, purifica, eleva hacia el cielo. Así es la fe cristiana.

Pero, poner un falso objeto de la fe, servirá solo para destruir los buenos principios del alma; no será durable y fácilmente será sustituido por otro objetivo, igualmente falso. Cuando la gente es atraída por algo, que existe y es real, pero que es si es bajo y malo, entonces tal fe los rebajara moralmente y ellos caerán en las redes de las fuerzas del mal.

La credulidad no es la fe. La credulidad es la exposición de la ligereza, la percepción superficial de lo oído, demuestra la pereza del alma, la pereza y ingenuidad de la mente. Recibido fácilmente, de la misma manera se pierde.

La fe religiosa trae el contenido y el sentido a la vida del hombre, crea la plenitud de la vida espiritual. Ella, aunque sea temporalmente, aparta de los bajos intereses terrenales, y en general, introduce en la región de sentimientos elevados, moralmente puros, santos. Seria fácil llegar a tal fe? — Esto depende del estado anímico del hombre, del contenido de sus pensamientos, costumbres y aspiraciones. Cuan mas pura es el alma, tanto mas fácil percibe ella lo bueno, mas sensible es al bien, mas fácil responde al llamado de lo alto. Pero es mas severa, que la credulidad, exige siempre cierto sacrificio. Pero este sacrificio, teniendo la fe, se hace mas liviano, y en casos extremos, poco frecuentes, lleva a un gozoso autosacrificio. Una fe así, casi no exige demostraciones visibles o mentales. Por eso dice el Evangelio: "Bienaventurados, los que no vieron y creyeron."

Existe una falta de fe no pecaminosa: esta es la fe todavía no consolidada, unida a un sentimiento de pena ante la debilidad de su alma. "Creo, ayuda mi incredulidad": esta confesión no impidió la curación del joven poseso, según el Evangelio. La fe de ap. Tomas era unida a la sed de ser plena, fuerte, expresada con las palabras: "Si no viere... no creeré," en el sentido — no tendré a esta alegría, que me daría "ver" y que Uds. poseen. Ocurre, que la duda o "desconfianza" hacia la verdad de la buena nueva, muestra la importancia excepcional de esta nueva para el hombre, y al tiempo, la pureza o altura de su alma, como lo vemos en el ap. Tomas.

La fe religiosa no es la creencia en sus propias fuerzas. Se equivocan profundamente algunas sectas religiosas, cuando enseñan que la fe es benefíciente y su valor es incluido "en si misma"; es la credulidad a lo que uno desea: convencer a si mismo de su salud; creer en su éxito; la fe en el bienestar propio. Una fe de esta clase es — un engaño de si mismo y es enemiga de la religión cristiana.

Afirmamos con toda seguridad, que nuestra fe cristiana es el primer dogma cristiano. Justamente con esta palabra comienza nuestra confesión cotidiana: "Creo en un Dios Unico..." según el Credo de Nicea-Constantinopla.

Según una expresión pintoresca de san Irineo de Lyon, la fe es la vasija para sacar el agua viva: el agua viva es la Gracia Divina.

No teniendo fe, es imposible complacer a Dios, porque se requiere del hombre creer que Dios existe, y a los que Lo buscan, les recompensara. Por eso se nos prescribe: "Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos" (2 Cor. 13:5), — inspeccionen si se encuentran en la fe, instruye el Apóstol.

A que capacidad del alma pertenece la fe: a la mente, a la voluntad , al sentimiento?

En parte el objeto de nuestra fe lo guardamos en la mente. Pero ella es algo otro, que conocimiento, algo mucho mayor, que la ‘suposición convencida’ que se encuentra a menudo en nuestra vida. Ella posee una fuerza de moción especial.

Ella no puede ser llamada una "manifestación de voluntad," porque, aunque la fe puede mover las montañas, el cristiano renuncia a su propia voluntad, entregándose a la voluntad Divina: "Que se cumpla Tu voluntad sobre mi, pecador."

Es ella un sentimiento? Pero es mas compleja que un sentimiento aislado: en ella hay elementos de miedo, veneración, devoción, humildad. De manera que ella traspasa a todo el complejo anímico.

La fe es efectiva, cuando el alma esta unida a la Gracia Divina. Y eso se produce en forma máxima, cuando ella se tiñe, se úne con el amor, según el ap. Pablo: "solo vale la fe, que obra por el amor" (Gal. 5:6), y que es bien expresado en eslavo: "ayudamos a la fe con el amor."

La fe es una fuerza actuante. Pero ella actúa no con la fuerza de imaginación, ni autosugestión (como se lo representan algunas sectas), sino porque úne con la fuente de toda fuerza — con Dios. "El que cree en Mi, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva" (Jn.7:38), dijo el Señor.

Sobre la fe, como sobre una roca esta edificada la Iglesia de Cristo. "Por la fe conquistaron reinos, hicieron justicia...taparon bocas de leones, apagaron fuegos impetuosos, evitaron filo de espada, se hicieron fuertes en batallas, pusieron en fuga ejércitos extranjeros" (ap. Pablo, Heb. 11:33-34).

Como hay que entender las palabras del Señor, dirigidas a los apóstoles: "Si tuviereis fe como un grano de mostaza y diréis a este monte: Pásate de aquí allá, y no dudareis, — así será"? No había hablado el Señor sobre la posibilidad de desarrollar en si una fe, como una fuerza propia? Ciertamente, No.

Por supuesto, no. Completamente no. El grano de mostaza, a pesar de su tamaño pequeño, tiene en si la plenitud de la vida en la dirección designada para el, sin ningún perjuicio; siendo vivo, en su pequeñez material lleva en si no perjudicado el "principio vital," y sin desvío, como si fuera sin propio pecado, va a su meta y llega a ella. El Salvador hablaba de la perfección hacia la cual deben tender los cristianos, a la cumbre de la santidad, que une los fieles con Dios: y que la fuerza Divina es ilimitada. Los Apóstoles y todos santos Milagrosos posteriores hacían curaciones y otros actos milagrosos, con el nombre del Señor Jesucristo, con la fuerza de su fe en Él y la fuerza de oración a Él, o con el nombre de la Santísima Trinidad, en cumplimiento de las palabras: "el que cree en Mi, las obras que Yo hago, también él hará, y mas de esto hará." Cuando el pueblo, pasmado, porque el ap. Pedro sano un hombre cojo de nacimiento, se agolpo a los apóstoles Pedro y Juan, Pedro dijo al pueblo: "porque ponéis los ojos en nosotros, como si por nuestro poder o piedad hubiéremos hecho andar a este?...la fe que es por Él (Señor Jesucristo, Hijo de Dios), la fe le ha confirmado Su nombre, y la fe, que es por Él ha dada a éste esta completa sanidad en presencia de todos vosotros (Hech., cap. 3).

La esencia del cristianismo — es la fe en el Hijo de Dios Unigénito, que vino en la carne para la salvación de los hombres, para que tengan la vida eterna en Dios. La finalidad de todas las Escrituras del N.T. es afirmar en esta fe los llamados y a los que respondieron al llamado (como leemos en Jn. 20:30,31). En principio, todo el cristianismo histórico, en el sentido amplio de la palabra, se basa sobre este punto principal de la fe. Y sin embargo, el cristianismo se ha fragmentado en numerosas corrientes separadas unas de otras. No es sorprendente, que los mas sensibles de los cristianos quieren llevar a los diversos conceptos a la unidad. La idea salió del protestantismo. Para ellos es muy deseable la entrada en este "movimiento" de las antiguas iglesias históricas, a pesar de que es ajena para ellos su "ortodoxia" y conservatismo. Los representantes de la Iglesia ortodoxa, que se encuentran en una situación difícil, tienen esperanza de ver en este "movimiento" cierta defensa y por eso contestan al llamado.

Son débiles las esperanzas de unos y dan lastima las esperanzas de otros. Llama la atención, que el ateísmo organizado apoya este movimiento y lo ayuda.

Es en vano, que los ortodoxos, entrados en este movimiento, cedan, sacrifiquen una serie de puntos de su fe ortodoxa. Esta olvidado y perdido lo principal, lo mas importante. Todas los cristianos, que perdieron la ortodoxia, no pertenecen a la Iglesia. Y los ortodoxos, entrando en el movimiento ecuménico, no ven, que se están apartando de la Iglesia. Porque la Iglesia no es la unión de pecadores y poco creyentes, dirigidos por "teólogos científicos." La Iglesia es la existencia y un único mundo espiritual, un organismo celestial-terrenal, cuya Cabeza es Cristo. La Iglesia tiene la plenitud de la santidad y de la unión. En lo espiritual la dirigen los Apóstoles. Es realmente Universal, ya que abarca lo celestial y lo terrenal. Nosotros, los terrenales vivimos en ella, respiramos su espíritu, pero somos todavía "los llamados." Somos elegidos, aceptados, pero todavía no tenemos las vestiduras adecuadas para entrar en el Aposento de Cristo. "Veo tu Aposento decorado, mi Salvador, pero no tengo vestidura para entrar en el." Nos amenaza, todavía, el peligro de desviarnos, como muchos y muchos han perdido el camino. Estamos en la Iglesia, pero en el rango de los que se están salvando, y no, en los ya salvados. Y por eso debemos ser sobre todo fieles a la Iglesia, donde recibimos ayuda de nuestros maestros celestiales y hermanos.

Creo en la Unica, Santa, Conciliar, y Apostólica Iglesia, que estaba, esta y estará hasta el fin del mundo.

 

 

Desde el conocimiento a Teoconocimiento.

 

"Conciderad los lirios del campo: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun

Solomon con toda su gloria se vestio asi como uno de ellos" (Mat. 6:28-29).

"Lo que de Dios se conoce les es manifiesto... Porque las cosas invisibles de Él, Su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo,

siendo entendidas por medio de las cosas hechas" (Rom. 1:19-20).

Estamos acostumbrados de usar los dones de naturaleza para satisfacer a nuestras necesidades vitales. A veces también es preciso defenderse de la fuerza de la naturaleza; ocurre hasta, que debemos luchar con ella. La investigación científica de la naturaleza esta en su potencia. Esta orientación científica es casi totalmente dirigida hacia diferentes usos de su fuerza y material en la meta practica y utilitaria. La preocupación estética sobre el mundo vegetal esta dictada en realidad por el deseo de embellecer nuestra vida, satisfacerla, es en cierto modo lucrativo. Y solo parece desinteresado el estudio del mundo animal con observaciones científicos y experimentos, pero con el concepto materialista. Este carácter terrenal y utilitario de conocimiento de la naturaleza ahora esta considerado pleno, inteligente y racional.

Pero hay no poca gente para la cual no está totalmente aceptable la unilateralidad de esta dirección, su estreches, egoísmo y su poca sana influencia sobre el alma. Si la humanidad, en su totalidad, proclama: "todo para nosotros," entonces la moral individual concluye: "lo que esta adelante mío, es para mi." He aquí uno de los motivos para violar las leyes de la vida social y para los crímenes. Esta es una simple y natural conclusión mental.

En cambio, nosotros vivimos con conceptos cristianos, hasta independientes de estas conclusiones practicas. Nuestro intelecto observa la naturaleza en toda su grandeza. Ella esta plena de misterios no descifrados, esta plena de inteligencia no totalmente accesible para la mente humana. En sus fenómenos mas comunes, se abren unas fuerzas, hasta ahora no comprendidas. El universo, tanto en su totalidad, como en sus particularidades, tiene una dirección, concordancia y tendencia a una meta. El esta lleno de inteligencia.

Nos queda aceptar abiertamente, que la naturaleza no necesita de los cuidados del hombre. Mas todavía, nuestra actividad, a menudo, aparece como vulneración de sus derechos; sobre espacios enormes de la tierra, en lugar de la vegetación viva, ocuparon superficies muertas o construcciones inanimadas.

Pero la grandeza de la mano creadora de Dios, revelada en la naturaleza, con esto no disminuye. "Los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus manos." Por esto nuestros instructores, padres y maestros de la Iglesia, de todos los tiempos, dirigen a menudo nuestra atención a la naturaleza — predicadora de la potencia, benevolencia y grandeza Divina. Así san Basilio el grande en su obra "Seis días" nos presento el cuadro del nacimiento del Universo en toda su diversidad, según el libro de Génesis. San Gregorio, obispo de Nicea, su hermano, se expreso sobre el misma tema, aclarando y completando lo dicho por Basilio, fijando especial la atención sobre el origen de la humanidad. El beato Juan Damasceno en si obra "La exposición de la fe" hasta introdujo una parte sobre el movimiento de las luminarias y su orden general, de acuerdo a los conceptos de la ciencia de aquel tiempo. Y tal cercano a nuestro tiempo, san Juan de Kronstadt, en su diario "Mi vida en Cristo" ni solo llama ver a Dios en la naturaleza, sino llevo a cabo una serie de sermones sobre la vida de la naturaleza, aplicados a los 6 días de creación, según la Biblia.

Aquí presentamos en calidad de ejemplo algunos pensamientos e imágenes vivas, tomadas de vida en el reino vegetal y "Sobre la organización del hombre" de san Gregorio de Nicea.

 

Sobre la naturaleza.

"Representamos mentalmente un vergel. En el crecen miles de diferentes arboles y otras tipos de plantas, los cuales cada uno difiere en su aspecto externo, color y cualidad del vegetal. Cuantos vegetales en un lugar y todos se alimentan con un mismo liquido, que llena a cada uno de ellos. A pesar, que la fuerza del liquido, que llena a cada uno de ellos, por se escénica es la misma, pero las plantas cambian la humedad en diferentes cualidades necesarias para ellas. El mismo liquido en el Abscento se vuelve amargo, en Cicuta hace un jugo venenoso, en otras plantas — azafrán, bálsamo o amapola — adquiere otras cualidades: en uno, los que calientan, en otro, refrescantes o una calidad media. El laurel, nardo y semejantes — tiene perfume; en higo y pera — es dulce; en vid se trasforma en racimos y en vino. Y la acidez de la manzana, el encarnado de la rosa, la blancura de la azucena, lo azulado de la violeta y color púrpura del hacinto y todo lo que se puede ver en la tierra, creciendo de una misma humedad difieren con tantas variaciones en su exterior, en su estructura y en sus cualidades."

San Gregório ve en todas estas manifestaciones el hálito milagroso de la vida. Lo llama "fuerza de la vida," o algo como "mente," o una especie de "alma." Este ultimo concepto el lo divide en tres categorías. En el reino vegetal — el alma vegetal alimenticia. En el mundo animal — el alma sensible. Y en el hombre — el alma inteligente. Aquí, tres peldaños consecutivos, unidos estrechamente entre si. Y el hombre desde el momento de su concepción pasa los estadios iniciales antes, que se abra plenamente su alma inteligente, desde el principio, potencialmente, inherente a él.

Siguiendo el camino, marcado por san Gregorio, podemos agregar, que primeros indicios visibles de la "sensibilidad" tienen también los vegetales, precisamente, hacia la luz, el calor y hasta el tacto extraño y puede ser tienen capacidad de reaccionar ante las "percepciones" y el instinto de atraer la atención con su parte estética. Sobre esto los botánicos podrían contar muchas cosas.

 

El Santo escribe sobre el hombre:

"Algo semejante al milagro en el campo animado nuestro, crea la naturaleza, o mejor dicho, el Soberano de la misma. Los huesos, cartílagos de las articulaciones, los palpitantes vasos sanguíneos, los filamentos, ligamentos, el cuerpo mismo, piel, grasas, cabellos, glándulas, uñas, ojos, nariz, orejas y todo el resto; y además miles de otras combinaciones, diferentes unos de otros con sus variadas cualidades — todo esto se alimenta con un mismo tipo de alimento, según su escénica particular. De manera que el alimento, acercándose a cada miembro, se modifica de acuerdo a este, haciéndose propio y afín con las cualidades de cada miembro. Con el ojo se condisuelve con este órgano de la vista, y como característico de las diferencias en la estructura del ojo, se trasforma en forma adecuada. Si afluye a los órganos del oído, se mezcla no el ser de oído, entrando en el labio, se hace labio; en los huesos se endurece; en cerebro se ablanda; pasa a la tensión de los músculos, se extiende en la superficies en forma de la piel, se trasforma en unas; se afina tanto, que forma de si los cabellos, con esto — una vez ondulados, crespos, si ira con movimientos sinuosos; otra vez, derechos y largos, cuando sigue en su movimiento las líneas rectas."

 

De nuevo el pensamiento pide completar lo que fue dicho 1500 años atrás con los conceptos de nuestros días. Hoy están a nuestra disposición los resultados de los inventos del siglo 20, mas aun de sus últimos decenios, que parecen sobrepasar las fuerzas de la naturaleza: el hombre penetro en la sabiduría escondida en la naturaleza, perfecciono sus bienes. Esto — visto superficialmente. Pero es suficiente dirigir la mirada en la profundidad de nosotros mismos y veremos que a todos los avances culturales, hasta la computadora, corresponden dones Divinos., no menores desde la profundidad de los siglos, que nosotros portamos adentro y usamos ampliamente. Así, en nuestro cerebro, en este discreto y modesto estuche tenemos un numero incontable de lugares, donde se ubican nuestros propios diccionarios de distintos idiomas (si les hemos estudiado), o solo los casilleros vacíos para ellos; bibliotecas en miniatura, compuestas de las notas de nuestra memoria; depósitos y archivos, llenos de materiales para recuerdos de toda la vida; obras vocales y musicales, introducidas en el alma; esta el aparato fotográfico y están guardadas sus innumerables tomas; encontrándonos en la soledad tenemos en nosotros mismos un auditorio y una clase para la autoeducacion. Nuestros aparatos cerebrales dan la posibilidad de reproducir, en cualquier momento el contenido de un discurso oído, obras vocales y cuadros vistos, allí fijados. Guardamos en nuestro cerebro muchos tesoros espirituales, pero a menudo dejamos ahí deshechos inútiles. Todo esto pertenece a nuestra alma inmortal. El dueño y administrados de estos bienes es nuestra mente, razón, que es también la evaluadora de sus colecciones. Su deber es — ligar nuestro contenido del alma, conservado en forma inexplicable, en nuestro órgano corporal, con toda la vida, que nos rodea, con la ayuda de una serie de otros órganos corporales.

San Gregorio propone al lector poner mentalmente al lado del hombre, como criatura Divina, una imagen esculpida o pintada del hombre: que diferencia entre la fuerza creadora Divina y la imitativa creación humana! Diremos junto con el jerarca, todos los alcances contemporáneos de nuestra mente no pueden ser comparados con la organización de nuestro organismo corporal-espiritual. Comparar la obra viva de Dios Creador y Providente — con lo carente de vida, artificial, muerto, por el genio del hombre alcanzado?

 

Sobre la composición y designo del hombre.

San Gregorio nota, que en su tiempo, fue objeto de "perplejidad en las iglesias" la cuestión que fue creado antes: el cuerpo o el alma del hombre? El santo niega el mismo planteo de la pregunta. Ni el cuerpo sin el alma, ni el alma sin el cuerpo: ellos en su origen son simultáneos y otras opiniones carecen de realidad, igual que la teoría de la transmigración de las almas.

En el ser humano, como ya se dijo, actúan tres fuerzas: vegetativa, sensitiva e inteligente. "Pero — no tres almas. La verdadera y perfecta alma, por su naturaleza es una, inteligente e inmaterial, unida por medio de los sentidos con la naturaleza material." "En la medida en que la perfección del alma es incluida en la fuerza de la mente y el don de la palabra, todo lo que no es así (en la naturaleza) puede ser solo algo parecido al alma, pero no es el alma real y solo cierta actividad vital, que es igualada al alma."

En que lugar hay que incluir el reino del alma. Unos lo ponen en el corazón, otros dicen, que la razón permanece en el cerebro de la cabeza." Los primeros ponen como prueba la posición del corazón en el centro del cuerpo, gracias a esto todo movimiento voluntario cómodamente se transfiere a todo el cuerpo. Los segundos ven el templo de la razón en el cerebro de la cabeza, dicen que la cabeza es organizada por la naturaleza como una fortaleza de todo el cuerpo, como algún rey, en ella habita la mente, rodeada de puntos sensitivos de la envoltura cerebral, como si fueron sus mensajeros y guardianes. "Acepto yo también como justo, que en la base de los sentidos se cuenta la envoltura cerebral, según las palabras de los naturalistas, que cubre el cerebro, y por eso la fuerza pensativa del alma a menudo es llevada a la confusión; escuchando afirmaciones de los expertos en anatomía, no les niego... No vamos a disminuir la importancia del corazón...pero que enmudezca toda palabrería vana de la gente, guiada por adivinanzas y que encierra a la actividad mental, como en una vasija, en alguno de los miembros corporales... El alma y la mente pertenecen a todo el cuerpo, a todos los miembros, ellos además se elevan por sobretodo...Pero en cuanto el cuerpo es organizado como un instrumento musical, entonces, como a veces ocurre en la música, que los profesionales no pueden demostrar su arte, si el instrumento es inservible. — Así también la mente, actuando sobre todo el instrumento — su cuerpo, o sobre los miembros aislados, logra el éxito, cuando los miembros se encuentran en el debido estado natural; en cambio, donde ellos no están en el estado natural normal, la mente no tiene éxito y permanece inactiva."

El principio común simultaneo del cuerpo y el alma, según la ley superior, esta dispuesto por la voluntad de Dios, de manera que el hombre "no es mas ni viejo ni mas joven de si mismo.".. Como, hablando de un grano de trigo, o cualquier otra semilla, decimos, que potencialmente contiene en si todo lo que se refiere a su futura madurez: las hojas, el tallo con su nudo, la espiga, el fruto y las cerdas sobre el, — de misma manera afirmamos que se encuentran los dos componentes del organismo, en que se siembra para el inicio de la vida del hombre con todas sus cualidades. El aspecto distintivo de la personalidad ya esta contenido en sus posibilidades. "Reconocemos, que lo que proviene del organismo vivo, para el comienzo de su vida, no es algo muerto e inanimado. La mortalidad es la consecuencia de la perdida del alma."

Como el cuerpo, desde el mas pequeño, llega a la edad perfecta, así también, la actividad del alma se desarrolla y se abre en el hombre correlativamente del cuerpo. Durante el desarrollo inicial del cuerpo, semejante a una raíz escondida en la tierra, en el mismo alma existe con anticipo solo la fuerza vegetativa... Luego, cuando la planta sale a la luz, y muestra su plantula al sol, florece el don de sensibilidad. Cuando madura y alcanza la altura correspondiente, comienza a traslucir, semejante a cierto fruto, la fuerza de la razón, no toda de golpe, pero rápidamente creciendo, junto con el crecimiento de su aparato corporal, trayendo, según las fuerzas del hombre, su fruto.

 

La imagen Divina en el hombre.

Este tema en nuestros días en cierto modo es actual, tomando en cuenta, que esta vinculado dentro del pensamiento teologo-filosofico de personas aisladas con el concepto sofiologico sobre un cierto principio femenino en la Divinidad. De ahí — una interpretación singular de Génesis 1:27:"Y creo Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creo; varón y mujer los creo." Aplicando, contra las leyes de la lógica, el método de conclusión inversa, encuentran en estas palabras de la Biblia el sostén al pensamiento sobre lo misterioso de "Sofía" en Dios, como Hipostacio femenino.

"Que significa la palabra "imagen"? y como en la imagen va a haber sexo masculino y femenino, cuando en la Protoimagen esta ausente?" — leemos el titulo del cap. 16 de la obra arriba mencionada de san Gregorio. Citaremos en forma abreviada el contenido de este y los capítulos siguientes.

Algunos de los paganos decían: "El hombre es el mundo en pequeño" compuesto de los mismos elementos que el universo. Pero con esta denominación altisonante, sin darse cuenta, que honraron al hombre con las cualidades del mosquito y el ratón...Que importancia hay en esto — de honrar al hombre con la imagen y semejanza del mundo, cuando hasta el cielo pasa y todo lo que hay en el? La Iglesia enseña, en cambio, que la grandeza humana no esta en la semejanza con el mundo de las criaturas, sino en ser idóneo a la imagen de la escénica del Mismo, que todo lo Creó.

Entonces, que significa la palabra "imagen"? Esto pertenece claramente solo a la misma Verdad. Y nosotros, hasta donde podemos, con conjeturas y suposiciones, pensamos así.

Por un lado, lastimosa pobreza del ser humano no se parece a la beatitud impasible de la vida Divina; y por otro — la Palabra, que pronuncio estas palabras, no dice mentira. Porque entonces el ser Divino es Beato, en cambio el humano es perturbado, si en las Escrituras el ultimo se dice semejante al primero? Investiguemos exactamente a estas declaraciones. Esta dicho: "Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza." Y creo Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creo." La creación según la imagen se lleva a cabo. Luego se repite lo dicho, y se dice: "Varón y mujer hizo," lo que es ajeno a la representación de la Divinidad. Por eso, la organización de nuestro ser es como doble: una semejante a Ser Divino y la otra — diferente separada en dos sexos distintos... "Pienso que con la Escritura Divina en lo dicho se nos otorga un gran y alto dogma y esto es así: el ser humano es algo intermedio entre los dos, o uno separado del otro y que se encuentran en los extremos máximos entre el Ser Divino-incorporeo y la vida inarticulada animal. Del Divino — el habla y la inteligencia; del inarticulado — la organización corpórea con la separación de la misma en sexo masculino y femenino..." Que nadie se enoje conmigo por el pensamiento subsiguiente. Dios por su Ser es toda la benevolencia hasta donde podemos llegar a comprender, y mas alto aun que todo lo bueno, pensado y percibido. El crea al hombre solo por ser benévolo, y lo hace no pobre en las bondades. Y la palabra Divina, sumando todos los bienes, que fueron dados al hombre, los señalo brevemente: creado "según la imagen Divina." Si la Divinidad es la plenitud de los bienes, y el hombre es Su imagen, por consiguiente, nos es ofrecida la posibilidad de todo lo hermoso, toda la virtud y sabiduría; y uno de estos bienes — es ser libre, porque la virtud es algo libre y no dependiente." Así es toda la humanidad, nombrada en la persona de primer hombre "Adan" (terrenal). Lo obligado e involuntario no puede ser la virtud.

Con gran precaución se refiere el Santo a la pregunta: porque a la humanidad es destinado este modo de multiplicarse y no "semejante a la vida de los ángeles," y razona así: "Nuestra opinión es que el Creador Omnisapiente previo, que la voluntad humana no se dirigirá por el camino recto hacia lo hermoso y bello, y por eso se apartara de una vida igual a los ángeles, entonces, para que no disminuya la cantidad de almas humanas, al perder el modo de ángeles para aumentar su cantidad, — el Creador impone otro método de multiplicación, adecuado para los pecadores, plantando en el hombre la manera de transmisión mutua animal e inarticulada. Por eso, creo, que el gran David, deplorando la pobreza humana, con estas palabras llora sobre el ser humano: "El hombre que esta en honra y no entiende, semejante es a las bestias que perecen" (Sal. 49:21).

Pienso — continua san Gregorio, — que toda pasión desde este inicio, como de una fuente, inunda a nuestra vida... La lujuria, cuyo comienzo es a los inarticulados, creció en actos humanos por medio de pensamiento. De ahí venganza, envidia, falsedad, malevolencia, hipocresía. Todo esto cultivado por el mal pensar de la mente. Pero también a la inversa, si la razón domina sobre aquellos movimientos, cada uno de ellos podría trasformarse en una clase de virtud. Así la irritabilidad produce el coraje; la timidez — el cuidado, el miedo — sumisión, el odio — rechazo al vicio, la fuerza del amor — el deseo de lo realmente bello, y el carácter digno, majestuoso, eleva por encima de los vicios... Así el gran Apóstol ordena de poner siempre la mirada en las cosas de arriba (Col. 3:2). Entonces la altura del pensamiento corresponderá a la hermosura de aquello, que es según la imagen Divina. En quienes no se apago lo bello, testimonian lo dicho, que el hombre esta creado a la semejanza de Dios.

Dios, que todo lo gobierna, previo la llegada de la plenitud del genero humano, y entonces terminara este modo de nacimiento de los hombres; terminara el tiempo y se producirá la renovación del universo. Con el cambio de todo, seguirá el pasar de la humanidad de lo terrenal y perecedero a lo eterno y impasible, cuando sonara la trompeta de la resurrección.

Así, a pesar de que el hombre peca, después de su caída en el paraíso, no perdió la imagen Divina, teniendo la mente (la razón), que pertenece a su Imagen primordial. "Como lo mas bello y prefecto sobre todos los bienes es la Divinidad misma, la mente se adorna con la semejanza a la imagen de la belleza primaria. Como el espejo refleja a lo que esta ante el, así toda su naturaleza anímica que proviene de la mente y se adorna con una hermosura semejante a ella, volviendo como el reflejo del espejo; y de este modo se guarda y conserva también la parte substancial del hombre. Así, mientras una se sostiene de la otra, se produce proporcionalmente el reflejo de la belleza verdadera: por medio del adorno elevado, lo sigue de cerca el inferior. Pero cuando sucede cierta ruptura de esta buena unión, o cuando lo alto es colocado atrás del inferior, entonces esta sustancia inferior, saliendo de su norma, hace visible su falta de imagen (porque la sustancia por si misma no tiene imagen y es desorganizada), y de ahí, por la falta de imagen se deteriora la belleza de la substancia (naturaleza), adornada con la razón. Sucede la transmisión de la impureza a la misma mente, así que en los rasgos del ser creado ya no se nota la imagen de Dios. La mente por si misma, quedando la imagen de la bondad, ahora como un espejo torcido, ya no refleja los rasgos del bien, pero refleja la imagen desorganizada, donde falta la imagen Divina. De ahí, al suprimir lo bello, se produce la entrada del mal."

San Gregorio dice: "Nosotros, temiendo a este final hundimiento, vamos a seguir al ap. Pablo en su llamado: No mintáis los unos a los otros, habiendoos despojado del viejo hombre con sus hechos, y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del que lo creo se va renovando hasta el conocimiento pleno (Col. 3:9-10), — que volvamos a aquella benignidad, que hace ver lo Divino, como en el principio Dios creo al hombre, diciendo, "Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza."

Cuando entramos en el conocimiento de las obras de los Santos Padres, en especial del siglo 4-5, nos inclinamos ante su conocer a la perfección las Sagradas Escrituras, y admiramos también su información en las ciencias de su tiempo: naturales, históricas, filosóficas y hasta de la mitología pagana (como san Gregorio), usándolo en la medida, que todo esto era útil para crear la visión del mundo puramente cristiana. Esta breve excursión en una de las obras de san Gregorio no hace ver la totalidad de su conocimiento acerca de la anatomía del cuerpo humano (sabidos en su tiempo), pero hace ver las condiciones favorables en el hombre para cumplir con el llamado de ser "amigo de Dios" como dice la Biblia de Moisés, y conservar, al mismo tiempo, su posición de rey en la tierra.

No es así nuestro tiempo moderno. El hombre contemporáneo trata la naturaleza con la mente practica y útil, y así igualmente sucede con los conductores de la conciencia humana, que observan la sicología del hombre, tomando su presente realidad, como debida y normal, capaz solo de desvíos hacia uno u otro lado. Así es nuestra sicología experimental, que se concentra en el estudio de diferentes desvíos, estados enfermizos y posiblemente también estados anímicos artificiales. Y de ahí — sobre la investigación de la síquica subconsciente, sus fuentes oscuras, su esfera nebulosa, manifestada en los sueños o en ciertas inclinaciones animico-corporales medio inconscientes. El echo es , que la sicología por si misma no es una ayuda educativa para la elevación moral de la gente. La misma historia conserva la memoria de los genios de la humanidad, ofreciendo un rico material, tanto sociológico, como para análisis de las condiciones positivas y negativas para el perfeccionamiento espiritual del hombre. No se habla tampoco del contacto con la religión. Por el mismo camino decadente se dirige también la literatura artística.

Nuestra época ya se revelo plenamente. Tal vez la época cercana y venidera nos dará fuerzas espirituales para restablecer la posibilidad de la unión del conocimiento científico y la fe cristiana, para crear una completa visión del mundo, los primeros pasos de la cual hicieron los Padres de la Iglesia. O van a quedar separados la fe y la ciencia, avanzando por sus caminos separados?

 

 

La Iglesia sobre la Sabiduría Providencial.

 

1. Que significa: "La Iglesia nos enseña"?

Como hay que entender la expresión: "La Iglesia enseña." Si yo estoy bautizado, soy miembro de la Iglesia, su parte: significará, que soy portador de la conciencia o autoconciencia de la Iglesia? Y mas aun, nosotros tomados en conjunto, participantes del servicio religioso, enseñados en la Ley Divina, no seremos expresores nosotros mismos de la conciencia eclesiástica conjunta? Donde estará esta Iglesia, que "enseña" para buscar en ella la enseñanza?

Detengámonos en esta pregunta.

Para contestar debemos darnos cuenta que es la Iglesia de Cristo en su totalidad. No vamos a olvidar, que la Iglesia es una parte sagrada del mundo de Dios, cuyo alcance y la plenitud del contenido espiritual ni nos imaginamos. Nosotros, partículas de la Iglesia terrenal, siendo de corta duración y además distraídos por las preocupaciones vitales: seria fácil para nosotros de elevarnos al nivel requerido para eso? Y por eso pedimos la guía de los santos Padres de la Iglesia de todos los siglos, que coinciden entre ellos en la enseñanza de la fe. Aprendemos, que ellos mismos ni decían nada personal en la enseñanza de la fe, sino sacaban de la fuente eclesiástica. Cual es esta fuente? Esta formada de dos partes: 1) de la Sagradas Escrituras del Antiguo Testamento y 2) y de lo dicho en el Nuevo Testamento por Jesucristo y Sus santos Apóstoles.

Cada uno de nosotros es ciudadano de un estado: sabe su territorio, su contenido, sus necesidades y todas sus leyes? Tampoco podemos simplificar el concepto de la Iglesia, cuya catolicidad se expresa no solo en el contenido de sus miembros celestiales-terrenales en su plenitud, sino también el la plenitud de misterios, algunos accesibles para nosotros, y otros desconocidos.

Y por eso, es necesario reconocer: cuando los hombres demasiado seguros de si mismos, piensan que tienen derecho de ampliar a la enseñanza de la Iglesia con investigaciones filosóficas o consideraciones propias — esto solo demuestra que ellos no conocen a la Iglesia, o no saben que la Iglesia tiene una respuesta lista para lo que ellos están buscando, y que irrumpen en una parte donde no se atrevan a penetrar ni los Angeles.

El ejemplo de esta injustificada autosuficiencia, unido al desconocimiento de la verdad eclesiástica, vemos en la inaceptable enseñanza, que pertenece a un grupo de pensadores rusos, sobre la "Sofía" — Sabiduría Divina, como una intermediaria entre Dios y el mundo en los caminos de la providencia Divina. Por eso nosotros debemos conocer como es la verdadera enseñanza sobre la Sabia Providencia Divina.

 

2. La Sabia Providencia Divina, que todo lo abarca.

La plenitud majestuosa de beneficencias de la Providencia Divina en el mundo se abre consecutivamente en dos imágenes: 1) En las Escrituras del A.T. — como la permanencia general de todo lo creado en la Mano de Dios; 2) en las Escrituras del N.T. — como la mas alta y perfecta manifestación de sabiduría y amor Divino, en la encarnación del Hijo de Dios para la salvación del mundo y su transformación en Reino de la Gloria.

El este segundo sentido conclusivo del Nuevo Testamento se nombre como Sabiduría a Señor Jesucristo. "Los griegos buscan ‘sabiduría’ — escribe el ap. Pablo, — pero nosotros predicamos a Cristo crucificado,...Cristo la fuerza de Dios y Su sabiduría." — "Hablamos sabiduría no de este siglo... mas hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta,... la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de gloria. Como esta escrito: cosas que ojo no vio, ni oído oyó. Ni han subido al corazón de hombre, son las que Dios ha preparado paro los que le aman" (1 Cor. Cap. 1-2). Así en el aspecto revelado y abierto o en el secreto y encubierto, todo confluye en la única Sabiduría Divina y la Iglesia firme y directamente confiesa al Salvador nuestro como Sabiduría Personificada: "No nos alabamos con la sabiduría, fuerza y riqueza, nos jactamos con Cristo, la Hipóstasis del Padre, Sabiduría!" (Cántico 3, del canon 4).

Debemos, todavía, con mayor atención detenernos sobre la imagen de la Sabiduría del A.T. y hacerlo por los intentos de la gente del siglo 20, que tratan de introducir en la conciencia cristiana ortodoxa algo nuevo bajo el nombre de "Sabiduría"

Para nosotros sin duda seria suficiente la primera pagina del libro Génesis, que relata la creación del mundo, para negarnos de buscar cualquier sabiduría independiente, fuera de la Sabiduría Divina Trinitaria. Seria suficiente, también el Salmo 104:"Señor y Dios mío, mucho te has engrandecido; te has vestido de gloria y de magnificencia...Hiciste todo con sabiduría!" Cuan hermosamente esta representada la conciencia de un simple creyente con toda su alma sumergido en la Providencia Divina, en Salmo 139, donde leemos:

 

"Oh Señor! Tu me has examinado y conocido. Tu has conocido mi sentarme y mi levantarme; has entendido desde lejos mis pensamientos.

Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos.

Pues aun no esta la palabra en mi lengua, y he aquí, oh Dios, tu la sabes toda.

Detrás y delante me rodeaste, y sobre mi pusiste tu mano.

Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mi, alto es, no lo puedo comprender. A donde me iré de tu Espíritu? Y a donde mi huiré de tu presencia?

Si subiera a los cielos, allí estas tu; y si en el seol hiciera mi estado, he aquí, allí tu estas. Si tomare las alas del alba y habitare en el extremo del mar,

Aun allí me guiara tu mano, y me estira tu diestra.

Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán;

Aun la noche resplandecerá alrededor de mi.

Aun las tinieblas no encubren de ti, y la noche resplandece como el día;

Lo mismo te son las tinieblas que la luz.

Porque tu formaste mis entrañas; tu me hiciste en el vientre de mi madre.

Te alabare; porque formidables, maravillosas son tus obras; estoy maravillado

Y mi alma lo sabe muy bien. No fue encubierto de ti mi cuerpo,

Bien que en oculto fui formado y entretejido en lo mas profundo de la tierra.

Mi embrión vieron tus ojos, y en tu libro están escritas todas aquellas cosas

Que fueron luego formadas, sin faltar una de ellas.

Cuan preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos, cuan grande es la suma de ellos!"

 

El Ant. Test. posee la presentación sobre la Providencia también cristiana. Y hay que reconocer, que esta primera, antigua tiene frescura del sentimiento. En las Escrituras del A.T. la Providencia Divina esta presentada con abundancia en imágenes vivas, usando alegorías y personificaciones, ya que se esta halando de la vida. Aquí se usan los mismos métodos que son comunes en la literatura y en nuestro lenguaje acostumbrado.

Entre los libros del A.T. hay dos, que contienen mucho material sobre la Sabiduría. Estos libros son: el libro de Proverbios y el de la "Sabiduría de Solomon." En ellas, frecuentemente se usan personificaciones, y esto dio pie de representar la Sabiduría bíblica personal. Pero, sin duda, el método de imágenes es el mas común de expresar los pensamientos.

Las alegorías en nuestro lenguaje son frecuentes: el tiempo es "engañoso," La vista me "traiciona," "se acercan" las fiestas; y otras. La personificación es un medio artístico común. "Porque el bosque esta pensativo? Con la tristeza sombría se nubló?" Las nubes del cielo — peregrinos eternos! Por los campos celestes en cadena de perlas, corren Uds., como yo desterradas, del norte querido hacia la parte sureña." "Campanitas mías, florcitas del campo! Porque me miráis las azul-oscuras?" (de las poesías rusas).

El escritor de los "Parábolas" avisa previamente que el escribe especialmente para "adolescentes" y para "simples" y espera, que el lector sea capaz de entender aquí "la parábola" o sea la alegoría, "el lenguaje difícil y sus adivinanzas."

Pero el autor del libro dice determinadamente, que él se refiere a la fuente Divina de la Providencia en el mundo; y por eso tenemos derecho de referir lugares particulares en esos dos libros a aquellos, donde el pensamiento del A.T. se eleva hacia la venida a la tierra del Salvador del mundo, como a la cima de la Providencia Divina.

Ahí mismo se alaba la sabiduría humana, si ella esta unida con la sensibilidad moral, porque proviene del mismo altísimo genero de Providencia.

 

3. La sabiduría — no es un ser personal.

La Sabiduría es una cualidad de la personalidad, su propiedad, diciendo de otra manera es un concepto abstracto; pero la cualidad no es un objeto real o una persona real. La gramática del colegio nos enseña, que solo aquellos sustantivos designan a objetos reales, que nacieron como substantivos: el mar, el cielo, la tierra, el árbol, la montaña. En cambio, los que provienen en la historia del lenguaje humano — de adjetivos, verbos o numerativos, como: calor, blancura; como viaje, descanso, lavado; como decena, centena — son conceptos sin su propia existencia, elles deben tener su portador. Estos son ideas de segundo tipo, y estos sustantivos son llamados abstractos, para diferenciar de los sustantivos de primer tipo, llamados concretos, o sea los que designan a objetos definidos, o personas en realidad, o aunque sea en nuestra imaginación. Estamos obligados de hablar de lo que los sofiologos saben mejor que nosotros. De estos conceptos abstractos y sustantivos originados de adjetivos y verbos, el politeísmo creo todo un mundo imaginario. Sabiduría, amor, coraje, belleza masculina, feminidad, comercio, fertilidad — se trasformaron en dioses o diosas. Que había de real, personal, detrás de estos conceptos? — Nada, nadie, vacío. Así era la religión del mundo greco-romano.

Cada objeto y cada ser vivo posee una masa de rasgos, cualidades y diferencias. La sabiduría, por si mismo, es solo una cualidad, ella puede ser plena — así es en Dios, o limitada — en un ser creado. En este y otro aspecto, esta representada en el libro de Parábolas. Si a ella están unidas muchas otras cualidades, ella no es su propietaria, es sola primera entre otras que tienen sus nombres y todo el grupo de cualidades tiene su común portador, bajo su propio nombre. Los sofiologos, posiblemente, por eso aplican a la palabra "Sabiduría" el nombre "Sofía," como de una portadora de la cualidad. Pero eso es pura tautología, — lo mismo, solo en dos idiomas: el nombre no aumenta el contenido del a que se refiere.

Que ocurre? No están escondiendo los sofiologos bajo los nombres bíblicos, un concepto concreto, substancial, pero ajeno a las verdades bíblicas y cristianas?

Que ruptura de la comprensión cristiana del mundo!

Que contraria es la idea misma al espíritu del monoteísmo bíblico! Ya que no hay nada en común en el monoteísmo con politeísmo, en la mismo entidad de ellos, igualmente como de la fe con el ateísmo. Toda escénica de la religión del antiguo pueblo elegido por Dios, toda el fuego de los discursos de profetas, reproches, amenazas, grito de dolor del alma, estaba dirigido a la lucha con ese pagano "culto de la vida," con el culto de "principios genéricos de la vida," en forma baja, lo que constituía el alma del politeísmo en general. La religión bíblica es completamente limpia de ese elemento. La Biblia juzga a todas las desgracias del pueblo y toda su historia desde el ángulo de su caída en las bajas concepciones paganas, y, relacionadas con ellos, orgías de este culto. La destrucción del estado, las desgracias del pueblo los profetas preveían y explicaban como castigos directos por la retirada del monoteísmo moralmente puro, y por la traición a Dios.

Es necesario en relación con esta tema hablar sobre el cristianismo?

El primer nacimiento del hombre, según el libro de Génesis, con finalidad y no en vano, es representado en la historia de la humanidad, como un nacimiento sin "sin mujer" — creación de Eva, de la costilla de Adan. De mismo modo el cristianismo recibió su comienzo con la encarnación del Hijo de Dios, sin hombre.

Nos contestan con la Biblia: "Y creo Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creo, varón y mujer los creo." De ahí sacan una conclusión inversa: lo que es establecido en la naturaleza humana, pertenece también a la naturaleza Divina. Tal conclusión esta violando las leyes de la lógica: conclusión inversa por analogía. Veo claramente mi rostro en el vidrio liso del espejo: pero no concluyo de ahí, que mi rostro esta chato y brilla como el espejo. El apóstol escribe sobre los paganos: "Se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido, profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria de Dios incorruptible en semejanza de imágenes de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles" (1 Rom. 21-23). Seria necesario imitarlos?

Solo glorificaremos a Dios por la sabia organización del mundo. Gracias a la Sabiduría Divina con la corriente de innumerables nacimientos, a través de la unión de elementos masculino y femenino, se alcanza en el mundo una infinidad de distintas formas, géneros, especias terrenales. Con estas condiciones se crea el cambio de generaciones, la plenitud y harmonía del todo y la riqueza de individuos, que hay, ni habrá, dos hombres completamente iguales entre si, tampoco dos arboles de estructura absolutamente igual. Si la reproducción procedería por una simple división, como ocurre en las formas elementales, entonces en cada genero de criaturas — todas serian idénticas, como dos gotas de agua. Pero la Sabiduría Divina estableció la ley de multiplicación a través de la unión corporal de dos criaturas de una especie, dándolos una diferencia correspondiente en la forma del cuerpo. Y se alcanzo no solamente la diversidad de formas. Mucho mas: así se creo la familia, célula básica da la sociedad humana. Pero ahora, por desgracia, tratan de destruir a la familia... Lo que pasa, que solo en la familia, desde la infancia, la gente aprende a amar y servir unos a otros desinteresadamente!

 

4. Sofía — "el alma del mundo?" el principio femenino en Dios?

Cuando la sofiología pasa a usar un lenguaje simple, nos descubre que tiene en vista al "alma del mundo" como portadora de sabiduría. Esto ya es otra cosa. Solo hay que reconocer, que el pensamiento sobre el "alma del mundo" es completamente ajeno al cristianismo y a la Biblia. Aquí debe seguir la negación de los sofiologos de los argumentación Bíblica y de tratar de cristianizar esta idea.

En realidad, los lideres de la idea de alma del mundo van por diferentes caminos: o se apoyan en las filosofía precristiana, o toman ideas del gnosticismo, o directamente — del paganismo. El cristianismo rechazo a esta enseñanza hace tiempo, y rechazo abiertamente junto con el gnosticismo, después de los intentos de introducirla en la conciencia cristiana.

Porque esta idea en tiempo lejano estaba presente en el cristianismo?

Ya que el alma de cualquier cosa es su centro, es propia de el y esta incluida en el, de esto resultaría, que todos los fenómenos negativos de la vida del mundo y de la humanidad, cada persona consciente, todo el mal, que existe realmente caería como la culpa sobre el alma del mundo. Porque que clase de alma de él seria, si se atribuía solo los hechos positivos del mundo? No, ella sufriría bajo el peso del mal, sin fuerzas de regenerar su cuerpo del mundo. Seria necesaria solamente a la humanidad para cargar sobre ella toda la responsabilidad propia de la gente? Semejante tentación es deshonesta y vana!

En cambio, representando esta alma, como una criatura ideal, pura y divina, como un ángel de guardia (existe tal punto de vista), entonces, teniendo la gran Providencia Divina, que daría esta alma al mundo?

Y he aquí, en lugar de una respuesta, se revela otro motivo, mas profundamente escondido de la sofiologia: ellos dicen, — que en la enseñanza de la Iglesia no hay plenitud del concepto mundial, falta el "principio femenino," dado en la naturaleza. Aquí la discusión pasa ya a las mismas bases de la existencia. Y ante nosotros nítidamente se muestra la caída de la visión del mundo cristiano en un poso pantanoso de las nociones politeístas paganas, y en los cultos de la antigüedad. Justo en nuestro tiempo, ellas están estudiados con detalles y los cultos antiguos se presentan en toda su evidencia, — no se puede negar, — de abierta indecencia y abominación, atrayendo en parte la atención de los escritores contemporáneos, que la están adaptando y cultivando. Sin duda, de la esfera sofiologica se extrae solo la idea pura: de la plenitud de la organización del mundo, "plenitud de la vida" que se expresa en la presencia de dos partes constitutivas del mundo vivo: — genero masculino y femenino. Y como en las presentaciones modernas no eclesiásticas, el cristianismo esta reducido al nivel de todas las religiones mundiales, entonces, debido a su lugar preponderante, nace la idea de purificar y completar la enseñanza eclesiástica con el principio femenino, como fuerza activa en el mundo.

Pero no nos atrevamos a aplicar las leyes de la vida, dados a nosotros en la tierra, a la parte celestial, divina, a la parte habitada por los Angeles, espíritus no corporales!

"Sofía, hipóstasis cuarta?" — hay que contestar brevemente.

Si imaginarla como persona del ser Divino, — ella no tiene lugar en el cristianismo, hasta en las formas mas alejadas de la ortodoxia. Hay cristianos, que no creen en la Santísima Trinidad, pero los que confiesen el Cuarteto — no existen.

En cambio, si se trataría de una "criatura-hipostasis" podría ser solo la primera, el comienzo de la incontable serie de personas creadas, individualidades. Pero dirán, que ella, con su existencia, engloba a todos, que se encuentran mas abajo, entonces, también a nosotros?!

 

La vida del mundo en el Espíritu Santo.

El mundo humano vive en estado pecaminoso.

Porque también "La creación fue sujetada a la vanidad, no por su propia voluntad, sino por causa del que la sujeto (el hombre) en esperanza; porque también la creación misma será liberada de la esclavitud de corrupción, a la libertad gloriosa de los hijos de Dios" (Rom. 8:20-21).

Pero la benevolencia, amor, misericordia, amor a la humanidad Divinas, no tienen obstáculos. No hay en la Palabra de Dios, ni en la fe de la Iglesia Ortodoxa, ni un indicio de alguna colectiva, congregada, y al mismo tiempo individual "alma del mundo." "Con el Espíritu Santo cada alma, todo lo que respira, se vivifica." El salmo 51, obra del Antiguo Testamento, un constante compañero de la oración cristiana, testifica una fe eterna en el Espíritu Santo Divino, que permanece en el mundo y en los fieles: "No me eches de delante de ti, y no quites de mi tu santo Espíritu, vuélveme el gozo de tu salvación, y Espíritu Poderoso me sustente" — rezamos con estas palabras del salmo.

El escritor del libro de la Sabiduría de Solomon: ΏY quién podrá conocer tus intenciones, si tu no les has dado primero la Sabiduría, o no le has enviado de lo alto tu Espíritu Santo? (9:17)... Por eso me volví al Señor y le supliqué; le dije con todo mi corazón (25-26)... ("habiendo hablado muchas veces a los padres por los profetas," Hebr. 1:1)... Supe, pues, todo lo que está oculto y todo lo que se ve, puesto que la sabiduría que lo ha hecho todo me lo enseñaba.] En ella se encuentra un espíritu inteligente, santo, único, múltiple, ágil, móvil, penetrante, puro, límpido, no puede corromperse, orientado al bien y eficaz. Es un espíritu irresistible, bienhechor, amigo de los hombres, firme, seguro, apacible, que lo puede todo y que vela por todo, impregna a todos los otros espíritus por inteligentes, puros y sutiles que sean… y tu Espíritu imperecedero está en todo! (Sab.S. 7:21-23; 9:17, 12:1).

Protegiendo a si mismo y a su pueblo de la representaciones diabólicas politeístas, los conductores espirituales del pueblo judío mantenían firmemente la idea de monoteísmo; pero con esto, también en A.T. penetraba en el pensamiento de hombres elegidos el misterio de la existencia de Palabra en el Padre, como también del Espíritu Santo, el misterio de la Trihipostasis.

La Sabiduría es el patrimonio de todas las personas de la Santísima Trinidad. El cristianismo predica a "Cristo — la Fuerza Divina y la Sabiduría." Pero en el Espíritu Santo se ve la sabiduría como una fuerza activa, que eternamente otorga la vida en el mundo, y como la fuente de la Gracia Divina y santidad.

No tiene ninguna importancia en la enseñanza cristiana expresar a los conceptos de la fe en uno o otro genero gramatical. Esta diferencia depende de las características de distintas idiomas. Así, en griego, la palabra "Espíritu" es de genero neutro. Nosotros (en ruso) justamente, los sustantivos calificativos, que no designan objetos concretos, los expresamos en el genero femenino.

Si el pensador del A.T., el autor de "Sabiduría de Solomon," como el mismo testifica, ama a la sabiduría, proveniente del Espíritu Santo "La amé más que a la salud y a la belleza" (7:10), como nosotros , miembros de la Iglesia de Cristo, que vive con el Espíritu Santo, no vamos a reconocer en Él al Autor de la vida general...? "Porque la grandeza y la belleza de las criaturas dan alguna idea del Que les dio el ser" (13:1-5). El servicio ortodoxo de la Iglesia esta lleno de la glorificación del Padre e Hijo y Espíritu Santo en un Ser. Esto esta en cada conclusión de todos los pedidos, en las exclamaciones del sacerdote y al final de casi toda oración. Con la invocación del Espíritu Santo comenzamos a todas nuestras oraciones. Los Sacramentos de la Iglesia se realizan mediante la fuerza del Espíritu Santo. Después del Bautismo enseguida recibimos Su sello. La fuerza del Espíritu Santa que otorga la vida, canta la Iglesia durante los breves himnos de Matines dominicales y el servicio de la noche (antifonos).

 

"El Espíritu Santo hace fluir a toda la sabiduría..." — "al Espíritu Santo todo agradecimiento, en El todo vive y se mueve..." — "Camina junto a toda criatura..." — "de El la gracia y la vida para toda criatura..." — "Con el Espíritu Santo toda alma se vivifica..." — "del Espíritu Santo fluyen ondas de gracia que sacian a toda criatura para vivificacion..." — "Con el Espíritu Santo toda la riqueza de conocimiento Divino, la vista y la sabiduría..." — "Con el Espíritu Santo sostiene todo lo visible y lo invisible porque es el soberano..." — "De El todo lo viviente recibe el alma..." — "Con el Espíritu Santo lo divino para todos, benevolencia, razón, paz y bendición, ya que es igual en Su actividad al Padre y a la Palabra." — "La sabiduría del Espíritu Santo sobre todos: a El saludan las huestes altísimas con toda respiración interior" — "El Espíritu Santo es la fuente de los tesoros Divinos — de El la sabiduría, razón y temor: a El gloria, honor y sabiduría." — "Con el Espíritu Santo la profundidad de los dones, la riqueza de la gloria, la profundidad grande de los destinos..." — "por la gracia del Espíritu Santo se sostiene todo el mundo, El es Dios señorial, uniexistente el Padre y el Hijo."

 

Y no hay brecha! No hay lugar para el "alma del mundo"!

La Iglesia vive en Espíritu Santo y Él permanece en ella. Los pensamientos religiosos en las oraciones de la Iglesia están construidos en tal forma, pare que nosotros tomemos conciencia. Esta constante permanencia del Espíritu Santo en los fieles y entre los fieles; pedimos una renovación de Su cercanía a nosotros.

 

La vida en la fe.

"Dios es Luz, y no hay ningunas tinieblas en Él" (1 Jn. 1:5). Que significa llamar a Dios Luz? — Esta claro, que se piensa en la perfección Divina: perfecto Bien en perfecta Pureza, perfecta Santidad, perfecta Verdad, perfecta Benevolencia y Amor, y unida a ellos perfecta fuerza creadora, perfecta Providencia sobre el mundo, su observación y su Conocimiento.

Según la instrucción de los padres de la Iglesia, la Luz sin embargo no es la escénica Divina, es solo la plenitud de Sus cualidades y la manifestación de ellos. El salmista expresa en el salmo 104 esta manifestación con las palabras: "El que se cubre de luz como de vestidura."

San Gregorio el Teólogo enseña:

"Dios es la Luz altísima, inaccesible, inexpresable e inalcanzable a la mente e imposible de expresar con las palabras" (Palabra en el santo Bautismo). — Por eso la Divinidad en Su Persona es hasta imposible de nombrar... Los antiguos y los mas sabios de los hebreos no soportaban, que se escribiera con las mismas letras el nombre Divino y los nombres de las criaturas, tampoco pronunciar el mismo nombre del Ser eterno y único con distracción. Solo en cierto modo es aplicable a Él la palabra "Existente." Y no solo porque el Mismo Altísimo Se aplico este nombre para Moisés y ordeno decir al pueblo: YO SOY (Jehová) me envió a vosotros (Ex. 3:14)... sino también porque no estaba ni estará limitado o interrumpido por lo que sea (Palabra 30, "la Teología").

 

"Hemos visto la Luz verdadera"

La luminosidad Divina se extiende sobre el mundo. Desciende y penetra en las almas humanas. Tenemos esperanza, que penetra no solamente el las almas cristianas, pero también en las de la gente, que tienen en el corazón la aspiración a lo alto, la sed de conocimiento de Dios.

Es importante recordar, que las palabras "la luz de la fe" no es solo un "símbolo" del sentimiento de la fe, sino expresa un verdadero esclarecimiento o resplandor del alma. San Gregorio en sus palabras sobre el Bautismo (la fiesta de la Luz) nos da ejemplos de la fe del hombre del Antiguo Testamento, citando el Salterio:

 

"Alumbre mis ojos, para que no duerma de muerte" (13:3).

"Luz esta sembrada para el justo, y alegría para los rectos de corazón" (97:11).

"Iluminas maravillosamente desde las eternas montañas" (75).

"Dios es mi luz y mi salvación; de quien temeré?" (27:1).

"Envía tu luz y tu verdad; estas me guiaran" (43:3).

"Alza sobre nosotros, o Dios, la luz de Tu rostro" (4:6).

"En Tu luz veremos la luz."

 

En la Iglesia del Nuevo Testamento este resplandor es abundante y mas fuerte. Lo predijo el profeta Isaias: La luz de la luna será como la luz del sol, y la luz del sol será siete veces mayor, como la luz de siete días, el día cuando vende Jehová la herida de su pueblo y cure la llaga que le causó (Is 30:26). Y mas: "‘Levántate, resplandece, porque ha venido tu luz y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti! Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra y oscuridad las naciones; mas sobre ti amanecerá Jehová y sobre ti será vista su gloria. Andarán las naciones a tu luz y los reyes al resplandor de tu amanecer" (Is. 60:1-3).

El cumplimiento de la profecía de Isaias se nota ya en las primeras líneas del Evangelio de Juan (1:4,5,7,8,9), anunciando a todo el mundo la manifestación de la luz del amor Divino, que se lee en las Liturgias.

Y el Salvador enseñaba a sus discípulos: "Vosotros — la luz del mundo... Así que brille vuestra luz ante los hombres para que ellos vean vuestras obras buenas..." Y sobre Si Mismo ante los fariseos: Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en Mi no permanezca en tinieblas, pero tenga la luz de la vida.

Hay que mencionar, aunque brevemente, las epístolas de los apóstoles a los nuevos conversos.

El ap. Pedro así aclara el significado de entrar en la Iglesia de Cristo: "Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que llamo de la tinieblas a su luz admirable" (1 Ped. 2:9).

El ap. Juan el Teólogo: "La vida fue manifestada, y la hemos visto, y testificamos, y os anunciamos la vida eterna, la cual estaba con el Padre, y se nos manifestó... Dios es luz... Si andamos en luz, como Él esta en luz, tenemos comunión unos con otros, y la Sangre de Jesucristo Su Hijo nos limpia de todos pecados..." (1 Jn. 1).

Apóstol Pablo: Ustedes resplandecen como lumbreras en el mundo... (Filip.).

"Dios resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo" (2 Cor. 4:6).

"Nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos trasformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu Santo" (2 Cor. 3:18).

"Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman" (1 Cor. 2:9).

Con esta iluminación de las almas, con este alto esclarecimiento de la razón, — nos enseña la palabra de la Biblia, — se introduce en el alma una alegría o el hálito de felicidad.

"Luz esta sembrada por el justo, y alegría para los rectos de corazón" (Sal. 97:11), "Resplandeció en la tinieblas luz a los rectos" (112:4).

Juan, el Precursor del Señor, dice de si mismo: "El amigo de Esposo se goza grandemente de la voz del Esposo; así pues mi gozo esta cumplido. Es necesario que Él crezca, pero que yo mengue" (Jn. 3:29-30) (en el servicio publico). El ap. Pablo testimonia sobre si: "Me crucifique con Cristo" (así eran sus desdichas causadas por los enemigos de su predica), — lleno de alegría cristiana , la transfiere a sus hijos espirituales: "Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: Regocijaos!" ... "Hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía" (Filip. 4:1,4 lo que leemos también en sus otras epístolas). El ap. Juan, favorito de Cristo, se expresa todavía con mayor fuerza: y esto les escribimos para que la alegría vuestra sea perfecta. Aquí esta expresada la verdad, que con el perfeccionamiento moral, crece en el alma el sentimiento de alegría. Simultáneamente crece, como vemos de las epístolas citadas, el amor, y la relación mansa, amante, bienaventurada con la gente alrededor. Con esto, el que tiende hacia la luz, se nítidamente sus faltas y, todavía mas, sus caídas, no esta admirando sus obras, — lo que crea una humildad natural y noble, y en particular aporta el temor a Dios, como dice el Salmo 86 y también el la oración del servicio vespertino: Alegra el alma de Tu siervo...afirma mi corazón para que tema Tu nombre. Así es gamma de los estadios cristianos del alma. Esto lo que significa: "Vivir en la Luz." Así la Claridad Divina se vierte en el mundo.

 

Dos tipos de Iluminación.

Nosotros, gente de la llamada "cultura occidental" contemporánea, vivimos sin querer en dos esferas espirituales: a) En la esfera de la supratemporal Instrucción cristiana y b) en la época de la "instrucción" que comenzó en el occidente de Europa en el final del Medioevo. Vivimos en la época del racionalismo o pensamiento practico, paulatinamente separado de los principios religiosos, particularmente en el siglo "volteriano." En nuestro siglo esto alcanzo a una directa persecución del cristianismo, que cayo con mayor fuerza sobre la Iglesia Ortodoxa Rusa. Según el concepto de esta época son dignos de existencia solo las metas terrenales de la vida; y para los pensamientos de la vida eterna y el perfeccionamiento en el espíritu Evangélico — no hay lugar en la atención social y individual. Y para la protección de la "ética social" y orden alcanza la educación general, la vigilancia política, y sin duda, con lugares de recluso para los criminales. Así son los principios de esta época. La realidad esta ante nosotros: Millones de asesinados por su firmeza en la fe, miles de presos y deportados por sus protestas contra la presión física y moral, las guerras entre naciones y internas, crecimiento de criminalidad, destrucción moral, abundancia de sufrimientos personales, morales y físicos.

Podría parecer, que hasta en las transgresiones en la religión, habría que recordar esta practica cultura occidental, en su mejor parte se desarrollo sobre la base cristiana, — sea esto la tipografía (Guttenberg, Biblia, libros eclesiásticos), la literatura artística, "novelas" (del periodo romano escolástico); las creaciones de famosos compositores musicales (los servicios Divinos con órgano en templos católicos); en pintura (de la pintura sacra) o arquitectura (de la complicada arquitectura de Templos, del Oriente en especial).

Por otro lado — vemos, sabemos que la fe cristiana no rechaza a la cultura terrenal y la satisfacción de las necesidades vitales — lo que testimonian las Sagradas Escrituras. Así durante el periodo de 40 días después de la Resurrección de Cristo, Sus discípulos se dedicaron a la pesca durante las noches. El ap. Pablo, todo dedicado a la predica apostólica, se ganaba la vida, confeccionando las carpas para no sobrecargar a los demás. El evangelista Lucas era medico y pintor, y además escribió el Evangelio y los Hechos Apostólicos.

Pero, según la palabra del Señor: "no con el pan solo estará vivo el hombre." Y nuestra conciencia personal nos induce en que consiste nuestra dignidad, lo que significa que el designo de nuestra vida es mas alto que las necesidades de la simple existencia, y no se limita con esta parte animal, pero que no hay que privarse de la plenitud de la vida. Del punto de vista cristiano, diremos: seria privarnos no solo de las alegrías espirituales aquí, en la tierra, pero también de la dicha de la vida eterna en Dios, lo que ya es — una muerte espiritual.

 

La Luz y las tinieblas.

A medida que el conocimiento contemporáneo penetra en el pasado de la humanidad, se ve, que desde el principio eran propios al hombre don conceptos principales: la fe en Dios y la creencia en la eternidad (en Biblia — sobre el árbol de la vida" en el paraíso). Se tenia conciencia, que si no existe eternidad en Dios, en el futuro para el hombre después de una vida breve, insegura, no siempre feliz, — la muerte, y esto significa — derrumbe, vacío, tinieblas. Y este segundo, sin esperanzas — la muerte borra todo el sentido del primero — la vida terrenal. En la misma "visión del mundo" de un hombre sin fe, el ultimo renglón — es el vacío y las tinieblas.

No es así la visión cristiana del mundo, llamada con la palabra breve "fe." Sobre ella predicaba nuestro Señor Jesucristo a Sus discípulos y al pueblo en el Sermón del monte. "haceos tesoros en el cielo...porque donde este vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón. La lampara del cuerpo es el ojo; así es si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz" (Veremos claramente a si mismos, nuestros pasos y acciones). "Pero si tu ojo es maligno, todo tu cuerpo estará en tinieblas. Así que, si la luz que en ti hay es tinieblas, cuantas no serán las mismas tinieblas?" (Mt. 6:21-23). Que oscuridad aguarda al hombre en el futuro, cuando él, todavía en la tierra se desconecto de la Luz Divina... Cuídate hombre, para no declararte sin fe o ateo, con esto por adelantado prepárate para las tinieblas, sin la Luz Divina, fuera de Dios Omnipresente.

El escritor del libro "Sabiduría de Solomon" da una imagen terrorífica de la "oscuridad egipcia" absoluta, que sobrevino a Egipto antes del éxodo de los judíos — este es como un símbolo de aquella otra "oscuridad eterna."

Para un creyente, un cristiano, en cambio, "La luz ilumina en la oscuridad, que no lo va a envolver..." El evangelista Luca agrega a estos pensamientos las palabras siguientes de Jesucristo: "Así que, si todo tu cuerpo esta lleno de luz, no teniendo parte alguna de tinieblas, será todo luminoso, como cuando una lampara te alumbra con su resplandor" (Luc. 11:36).

Es en estas luminarias de la fe esta puesta, desde el principio de su existencia y se afirma la Iglesia única santa, católica y apostólica ortodoxa

 

 

La Iglesia de Cristo,

Según la enseñanza del beato Simeón, el Nuevo Teólogo.

En los primeros días del cristianismo, en los días cuando este contaba solo 30-40 anos de su existencia y tenia pequeñas y aisladas comunidades dentro el Imperio Romano, ya entonces, el ap. Pablo, siendo prisionero por su predica de Cristo, iluminado por la luz de la Gracia, — dio en una de sus epístolas el concepto enaltecido y pleno de la Iglesia de Cristo. Precisamente, como del Cuerpo de Cristo, un único organismo viviente celestial-terrenal. Dio la imagen de la Iglesia, santamente conservado por la conciencia general ortodoxa. Esta imagen se encuentra en su epístola a una comunidad eclesiástica de Efes. Aquí esta representado un aspecto majestuoso de la Iglesia como de la "plenitud de Cristo," "Aquel que todo lo llena en todo." Esta dado el perfil de una nueva existencia cuya escénica es la "unidad de amor," existencia que reúne a lo "celestial con lo terrenal" con uniones constantes y fuertes. Es suficiente citar en este caso un versículo de esta epístola (4:16). Leemos: "La Cabeza, esto es, Cristo, de quien todo el cuerpo, bien concentrado y unido entre si por todas las coyunturas que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor."

Para ese fin, escribe el apóstol, Cristo puso en la parte terrenal de la Iglesia "a unos como apóstoles, otros profetas, otros evangelistas, otros aun pastores y maestros." Pero que son estas ligaduras que recíprocamente afirman las partes del Cuerpo, "según la actividad propia de cada miembro de la Iglesia?" Que son estas ligaduras-acciones, que dan, simultáneamente, el "crecimiento" a cada uno, por si mismo, miembro de la Iglesia y con esto — el crecimiento, perfeccionamiento y plenitud a todo el cuerpo de la Iglesia celestial-terrenal baja la única Cabeza Cristo? Sin duda, con estas reciprocas ataduras del cuerpo de la Iglesia, lo que compone, reúne y une es la oración. Ya que — que representa en si mismo la Iglesia, si no es el "mundo de oración"? La oración puede ser llamada el aire, la respiración, la vida de la Iglesia. En forma semejante como en un telar los hilos (en este caso los hilos-oraciones) van en todas las direcciones, ellos unes a cada miembro de la iglesia con el Padre Celestial; a los miembros terrenales entre ellos y con los celestiales. Lo mismo esta en el cielo en la esfera de Angeles y Santos, solo en un grado mas alto y mas perfecto. Los terrenales rezan unos por otros y, según la ley del amor, por los difuntos; los celestiales — por los terrenales e igualmente por los hermanos difuntos, que necesitan ayuda. Por estos hilos de oraciones van glorificaciones y agradecimientos en ambas partes de la Iglesia, en la tierra uniéndose con pensamientos y sentimientos de penitencia.

Sin duda, las uniones dentro iglesia se manifiestan en actividad y acciones correspondientes, pero esta parte es derribada que sale de la fuente primera de oración. Este concepto es plenamente propio solo a la conciencia ortodoxa y al mismo orden y vida real de la Iglesia Ortodoxa. Nuestro servicio religioso es el indicador directo de este modo de vida de la Iglesia.

Se conserva este tipo de conciencia propia en la teología de los santos padres? Si, el pensamiento de ellos esta saturado de esto. Daremos el ejemplo de las obras de San Simeón el Nuevo Teólogo, cuya vida transcurría entre 1er y 2o milenio (paso a las moradas celestiales cerca del 1020). En su "Palabra" 24 expone los pensamientos sobre las acciones mutuas de la Iglesia de Cristo celestial-terrenal. El no pone ninguna diferencia clara entre los dos estadios de los miembros de Iglesia — terrenales y celestiales, — no porque él los niega, sino para mayor claridad de concepto de la Iglesia es "único Cuerpo de la Unica Cabeza," "la plenitud del que llena todo en todo."

San Simeón enseña:

"Todos los santos son en verdad miembros de Cristo Dios y como tales están unidos a "El y con Su Cuerpo. Cristo es la Cabeza y todos los santos, desde el principio, hasta el ultimo día, son Sus miembros y todos ellos, en conjunto constituyen el cuerpo como de un hombre. Unos de ellos son como brazos, que hasta ahora trabajan, y según Su santa voluntad, trasforman a los indignos en dignos y los presentan a El. Otros — en el rango de hombros del cuerpo de Cristo, que llevan los pesares unos de otros o tomando la oveja extraviada que vagaba en montes y abismos, la traen a Cristo y así cumples Su ley. Otros en el rango de pecho, que manan para los sedientos y hambrientos de la verdad Divina, el agua Purísima — las palabras de sabiduría y razón, ya que enseñan la palabra Divina y les dan el pan de pensamiento, que comen los santos ángeles, o sea la verdadera Teología como amigos amados de Cristo. Unos en el rango de corazón, quienes en su seno llano de amor hacen caber a todos los hombres, reciben en su interior el espíritu de la salvación y sirven de recipiente de indecibles y escondidos Misterios de Cristo. Otros representan las caderas, los que tienen en si la fuerza de misteriosa teología, que hace nacer pensamientos Divinos y con la palabra de su enseñanza siembran en los corazones la semilla de la piedad. Otros, al fin, en el rango de huesos y pies, que muestran el coraje y la paciencia en las tentaciones, como Job, y permanecen inamovibles en su resistencia en el bien, reciben las dificultades y las lleven con voluntad hasta el fin. De esta manera, ordenadamente, se constituye el cuerpo de la Iglesia de Cristo a partir de todos los santos de Él, y permanece entero y perfecto, para que sean unidos todos los hijos de Dios, primogénitos, inscritos en los cielos.

Que todos los Santos son miembros de Cristo y son el único cuerpo se demuestra en las Escrituras Divinas. Primeramente escuchen a nuestro Señor como El presenta la unidad invisible, que tienen con El los Santos, en las palabras dichas a los apóstoles: "Creedme que Yo soy en el Padre, y el Padre en Mi" (Jn. 14:11). "Yo soy en mi Padre, y vosotros en Mi, y yo en vosotros" (Jn. 14:20:17:20-26).

En la medida que la divinidad que recibimos a través del contacto con el Señor, es indivisible, es necesario que nosotros haciéndonos de verdad participantes de esta Divinidad, seamos inseparables de Cristo, ser un espíritu en un cuerpo (Gal. 3:28; Colos. 3:11; 1 Cor. 12:1-14). Como en moradas eternas, Dios a cada santo le da la parte correspondiente, así en el cuerpo de la Iglesia, cada una se adjunta en tal miembro de Cristo, el cual se merece. Esto lo dice también el ap Pablo en la misma epístola: "Dios ha colocado los miembros cada uno de ellos en el cuerpo, como El quiso" (1 Cor. 12:18). Así, hay muchos miembros, pero el cuerpo es uno. Deseando mostrar la diferencia de estos miembros y cuales son, él dice: "Vosotros sois el cuerpo de Cristo, y miembro cada uno en particular. Y a unos puso Dios en la Iglesia, primeramente apóstoles, luego profetas, lo tercero maestros, luego los que hacen milagros, después los que sanan, los que ayudan, los que administran, los que tienen don de lenguas" (1 Cor 12:27-28).

"Grande es este misterio; mas yo digo respecto de Cristo y de la Iglesia" (Efes. 5:32). Y en verdad, este misterio esta y seguirá siendo grande y por encima de todo lo grande. Que unión, contacto y parentesco tiene el Señor nuestro Creador de todo, con toda la Iglesia, como con la única esposa y es uno con ella, y siempre permanece con ella, como la amada suya. Pero esta unión es hermosa, como es que le gusta al Señor juntarse con la Iglesia — lo cual es impensable y indecible. También la Iglesia se une con su amado Dios y se adhiere a El, como el cuerpo esta adherido a su cabeza. Así al Iglesia — conjunto de fieles, o sea hijos de Dios, inscritos en los cielos, no puede ser un cuerpo entero y perfecto sin su cabeza — Cristo Dios nuestro. Y no puede vivir con la verdadera vida eterna, si no será alimentada por El cada día con el pan necesario, del Cual reciben la verdadera vida todos lo que Lo aman, y crecen en nombre perfecto, en la medida del cumplimiento de la edad de El.

Como la Iglesia es el cuerpo de Cristo, la novia de Cristo y mundo grande, y templo Divino, mientras los miembros de Su cuerpo son los santos, y mientras ellos no todos han nacido y se han mostrado aceptables a Dios, es claro, que el cuerpo de Cristo no esta todavía completo, Que todavía no se lleno el mundo superior, que no toda la asamblea de hombres entro en la Iglesia de Cristo. Pero, hasta ahora, hay todavía en el mundo muchos no creyentes, que tienen que adquirir fe en Dios; hay muchos pecadores, que, cuyo deber es arrepentiste, hay muchos rebeldes, que tienen que someterse a Cristo, muchos todavía deben nacer y complacer a Dios antes que tocara la ultima trompeta. Y así, deben nacer todos los previstos por Dios y llenar la medida de la Iglesia de los primogénitos, el Jerusalén celestial. Y entonces se cumplirá la plenitud del cuerpo de Cristo, recibiendo en si los predestinados por Dios, para ser semejantes a la imagen de Su Hijo, los cuales son hijos de la luz y del día. (San Simeón Nuevo Teólogo. Traducido del Griego por el obispo Teofano).

 

Folleto Misionero # S77d

Copyright © 2000 Holy Trinity Orthodox Mission

466 Foothill Blvd, Box 397, La Canada, Ca 91011

Editor: Obispo Alejandro (Mileant)

 

 

(notas_apologeticas_2.doc, 1-15-2002).

 

 

Edited by

Date

E. A.

12/15/01

C. M.

1/15/02